El gobierno celebra que el Ingreso Mínimo Vital llegó a más gente que nunca en abril, una noticia que analiza Marc Vidal en su 'Salida de Emergencia' de este jueves.

"El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha lanzado una campaña donde se vanaglorian de que el Ingreso Mínimo Vital llegara a 590.000 hogares en abril, 130.000 más que hace un año. Y en la comunicación que han hecho, lo destacan con emojis, corazoncitos, sonrisas y todo tipo de símbolos positivos. Incluso se felicitan de que el 41% de esos subsidios vayan directamente a menores de edad. De locos", apunta.

Sin embargo, "estas cifras no son para celebrar nada. Deberían de servir para entender que el riesgo de pobreza severa y de exclusión social crece y no puede ser nunca una noticia positiva. Puedo entender que el Ministerio se enorgullezca de ayudar a quien vive en precario, pero se echa de menos una reflexión de lo que supone esto realmente".

Y es que "España es el país de la Unión Europea con la tasa más alta de pobreza infantil, algo que no mejora basándonos en lo que indican esas cifras que el mismo gobierno publicita. Es más, si tenemos en cuenta el crecimiento del PIB, y que los efectos de la pandemia ya no pueden ser una excusa, esto lo que refleja es que tenemos problemas estructurales más graves de lo que pudiéramos pensar inicialmente".

Como decía Ronald Reagan, el éxito del Estado del Bienestar se mide por las personas que abandonan la asistencia social y no por cuántos se incorporan a ella.

"La cita de quien fuera presidente de los EE. UU. explica muy bien como debe medirse el éxito de las políticas sociales. La idea subyacente es que un sistema de bienestar exitoso es aquel que no solo provee ayuda temporal a quienes la necesitan, sino que además logra rehabilitar económicamente a las personas para que puedan independizarse de dicha asistencia. Es otro enfoque, muy distinto al que vivimos aquí ahora o, como principal ejemplo hasta hace poco, en Argentina", apunta el analista económico.

Añade que "en Argentina se romantizó la pobreza durante los 20 años de kirchnerismo. Se mostraban orgullosos de ofrecer cada vez más planes sociales. Festejaban que abrían nuevos comedores comunitarios o nuevos subsidios por hijo. Literalmente celebraban que estaban multiplicando la cantidad de personas que pasaban a depender del Estado por no tener oportunidades de desarrollo individual".

"Por eso no entiendo la campaña. Porque no hay nada que celebrar. Básicamente, porque, basándonos en lo que el mismo gobierno admite, en abril 590.000 hogares españoles vivían sin Salida de Emergencia", concluye.