Así ha perjudicado la ley D'Hont a Vox y PP en los resultados de las elecciones generales

¿Cuánto daño ha hecho este sistema y la fragmentación del vota a la derecha y a dónde han ido a parar los escaños de las pequeñas circunscripciones?

Aplicación práctica Ley D'Hont

Javier Castilla

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

El sistema electoral español está basado en un cálculo proporcional, la famosa Ley D'Hont. Esta se traduce en que los partidos que más votos tienen se reparten entre ellos los escaños en las pequeñas provincias y provoca, de forma directa, un perjuicio para los partidos menos votados que, en el mejor de los casos, solo logran obtener un escaño. Por ejemplo, de los más de 2.600.000 votos que Vox ha obtenido, cerca de un millón de estos no se han convertido en escaños, sino que se han perdido. Concretamente, Vox no ha conseguido ni un solo escaño en cinco comunidades autónomas donde los votos de la formación de Santiago Abascal suman más de medio millón en total.

¿Por qué se ha quedado en "la nada" una cantidad tan grande de votos? La explicación es muy sencilla: porque de las 52 circunscripciones que conforman España, tan solo en 18 de estas han conseguido un escaño o más. En las otras 34 circunscripciones, Vox también ha sumado votos, por supuesto, pero no los suficientes. Esto se produce porque, cuantos menos escaños tiene asignados una circunscripción, más caro es conseguir uno. Por ejemplo, en Ceuta, Cuenca, Huesca, Teruel, Guadalajara, Ávila o Soria, entre otras, un partido político necesita más del 30% del total de votos para tener un escaño. De lo contrario, los votos se pierden, que es lo que le ha sucedido a Vox y la razón por la que la unificación del voto en un solo partido hace la fuerza. Sin embargo, en otras circunscripciones como La Coruña, Granada, Pontevedra, Santa Cruz de Tenerife, Vizcaya o Zaragoza, solo se necesita entre el 13 y el 14% de los votos para conseguir ese ansiado escaño.

El resultado directo de este sistema es que la formación más votada, en este caso el PSOE, se beneficia, y a continuación te explicamos por qué. El partido de Pedro Sánchez, con 7.400.000 votos, ha conseguido 123 escaños. Si, por ejemplo, ese millón de votos perdidos de Vox se hubiera repartido entre otro partido de la derecha como el PP en todas las circunscripciones de España, la formación de Pablo Casado se habría acercado mucho más al resultado de Pedro Sánchez e incluso le habría disputado algunos de esos 123 escaños que se ha llevado.

Veámoslo con un caso práctico: en Huelva, donde estaban en juego 5 escaños, el resultado ha sido el siguiente:

Tabla 1 aplicación de la Ley DHont

Como se visualiza en esta tabla, elaborada por COPE, la ley D'Hont divide los votos de cada partido entre uno, dos, tres y así sucesivamente. A continuación, los escaños que estén en juego, cinco en el caso de Huelva, se les asignan a los cinco números más altos obtenidos que son los aparecen rodeados con un círculo en la representación. Pero, ¿qué sucederia si los votos de Vox se hubieran unido a los votos del PP? Lo mostramos en la siguiente tabla:

Tabla 2 aplicación de la Ley DHont

Efectivamente, la formación de Pablo Casado habría obtenido 76.000 votos que, tras aplicar la ley D’Hont, se habría traducido en que el Partido Popular habría obtenido 2 escaños. Pero no solo eso, sino que ese nuevo escaño se lo habría arrebatado a Podemos que, en este caso, era el partido con el quinto número más alto.

Vox, en el conjunto nacional, habría tenido el mismo número de escaños, pero el PP hubiera sumado uno más que se le habría restado a Podemos. Esta es la aplicación de la famosa ley D’Hont que ha sido clave para que esta situación se haya reproducido en muchas circunscripciones pequeñas que explica por qué eran tan sumamente importante estas provincias para Pablo Casado cuando intentó, de todas las formas posibles, pedir la unificación del voto del centroderecha.