En un momento trascendental para la historia de España, hace exactamente 45 años, el reloj marcaba las 11:40 horas de la mañana del 20 de abril de 1979. El concejal Antonio García Martín, en su papel como presidente de la mesa de edad del recién constituido Ayuntamiento de Burgos, pronunciaba con solemnidad las palabras que cambiarían el rumbo de la ciudad: “Y habiendo obtenido don José María Peña San Martín 17 votos que constituyen la mayoría absoluta legal, queda proclamado alcalde-presidente de la Excelentísimo Ayuntamiento de Burgos don José María Peña San Martín”.

Este momento histórico marcaba el inicio de una nueva era para Burgos y para toda España. Tras décadas de dictadura, el país se encontraba en pleno proceso de transición hacia la democracia, con apenas cuatro años de experiencia democrática y dos años desde las primeras elecciones generales tras la muerte de Franco.

El ambiente en el consistorio burgalés era de expectación y esperanza. Tres días antes, se había celebrado el último pleno del ayuntamiento saliente, dando paso a los concejales recién elegidos en las urnas. Era un tiempo de cambio, de trabajo por el bien común y de construcción de un modelo democrático de ciudad.

Sus primeras palabras como alcalde, en COPE

José María Peña San Martín, el primer alcalde democrático de Burgos, expresó su compromiso con la ciudadanía en sus primeras declaraciones a COPE, por aquel entonces Radio Popular de Burgos: “En este momento, embargado por la emoción, no puedo más que decir unas palabras de saludo muy cordial y prometer que, como acabo de decir en mi toma de posesión, entro al servicio de Burgos y para todos, absolutamente todos, los burgaleses. Con esto pueden contar sinceramente”.

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La llegada de la democracia a Burgos y a toda España representó mucho más que un cambio político; fue un renacimiento, una oportunidad para construir una sociedad más justa, libre y participativa. La democracia trajo consigo derechos y libertades fundamentales, un sistema político basado en el respeto a la voluntad popular y la garantía de la pluralidad y diversidad.

A lo largo de estos 45 años, Burgos ha vivido momentos de progreso y desarrollo, enfrentando desafíos y superando obstáculos, pero siempre con el firme compromiso de seguir construyendo una ciudad más democrática, inclusiva y próspera para todos sus habitantes.

Hoy, 20 de abril, al conmemorar este aniversario, es fundamental recordar y valorar la importancia de aquellos líderes y ciudadanos que trabajaron incansablemente por la democracia y por el bienestar de Burgos. Su legado perdura en cada rincón de la ciudad y en el corazón de sus habitantes, recordándonos la importancia de defender y fortalecer los valores de convivencia que nos hacen libres, con el objetivo de construir una sociedad burgalesa más justa, igualitaria y democrática para las generaciones venideras.