Ciarán "barre" Galicia, con más de 500 incidencias: 10.000 hogares sin luz

El 112 Galicia recomienda precaución a la hora de coger el coche este jueves: podemos encontrar ramas en la calzada o incluso algún desprendimiento provocado por las lluvias como consecuencia de los efectos de la borrasca que afecta a la comunidad desde la tarde del miércoles.

Los bomberos de Santiago de Compostela retiraron de madrugada un árbol en la N-634. Cayeron ramas incluso en la AP-9 en Carral o en la A-52 en A Cañiza.

También en el Campus Sur de la Universidad de Santiago (USC) han caído ramas que están siendo retiradas desde primera hora. En la capital gallega una tormenta con granizo sorprendió a los conductores pasadas las 8 de la mañana.

"Nos cogió una granizada cuando íbamos en coche", explica una vecina en Herrera en Cope Santiago. "Los niños preguntaban por qué no se suspenden las clases".

Los parques siguen acordonados para evitar riesgos, tanto en Santiago como en A Coruña, Vigo o Lugo.

500 incidencias de madrugada en Galicia

En total, según los datos del 112 han sido más de 500 las incidencias atendidas durante la madrugada como consecuencia de la borrasca. Más de 300 fueron por retirada de ramas de las vías públicas, también señales y cables del tendido eléctrico.

Precisamente la caída de cables ha provocado cortes de luz en Viso (Redondela) y también en Carballo (A Coruña). A media mañana de este jueves el número de hogares sin suministro se acercan a los 10.000. Las compañías suministradoras trabajan para solucionar las incidencias que afectan a la red.

Como indicencias destacadas en el moviliario urbano, en Pontevedra se desprendió una parte de la fachada de un edificio a las 23.30h en la calle Joaquín Costa, y en Abegondo (A Coruña) el techo de una piscina municipal pasadas las 20h.

En Cambre (A Coruña) se ha inundado la estación del tren y también un restaurante cercano.

Por lo menos hasta las 10 de la mañana no circulan trenes entre A Coruña y Ferrol ni entre Vigo y Ourense. Los trayectos se hacen en autobús. El resto de red ferroviaria de Galicia ha funcionado con normalidad durante la madrugada.

El aeropuerto de Santiago ha recuperado la normalidad después de una noche en la que fueron cancelados y desviados sucesivos vuelos.

Una conexión procedente de Canarias tuvo que ser desviada incluso al aeropuerto de Sevilla después de varios intentos de tomar tierra sin éxito.

Esta mañana sí han salido ya los primeros vuelos con destino a Barcelona o a Santa Cruz de Tenerife. Por la noche se cancelaron conexiones con Málaga o con Madrid por las fuertes rachas de viento que se registraban en el aeropuerto.

Árboles derribados y olas de 10 metros

Este jueves va a tocar hacer balance de daños: en Vigo un árbol se cayó sobre varios vehículos que estaban aparcados en la calle, y durante la madrugada los bomberos de toda Galicia han tenido que salir a retirar ramas, señales y contenedores de basura que habían quedado en medio de la vía pública.

En la provincia de Lugo Ciarán ha dejado rachas de 150 kilómetros por hora y un reguero de incidencias, afortunadamente ninguna grave. También en Ferrol ha habido multitud de salidas de los bomberos para restablecer la normalidad. Los portalones de entrada a uno de los pabellones de la Feria Internacional de Muestras del Noroeste cedieron a la fuerza del viento y amanecieron derribados. En ese mismo recinto se vacunas estos días los mayores de 70 años contra la gripe y el covid.

Para evitar complicaciones todas las ciudades anticiparon el cierre de los cementerios el 1 de noviembre y se suspendieron también actividades relacionadas con el Samaín.

"Teníamos previsto decorar la urbanización con elementos del Samaín pero lo suspendimos por el tiempo", cuenta en Cope Santiago una vecina de la ciudad.

En el mar la situación es también muy complicada. Está activada una alerta roja por olas que pueden alcanzar los 10 metros y hay que extremar las precauciones, sobre todo a primera hora coincidiendo con la marea alta.

En A Coruña han retirado los bancos de piedra del paseo marítimo por precaución. La duna en la playa de Riazor ha logrado frenar las embestidas del mar y en la marea alta de las seis de esta mañana las olas no llegaron a la zona de circulación de vehículos.

Con todo, las autoridades recomiendan alejarse de zonas batidas por el mar como espigones o entrantes de rocas. No salir a navegar ni practicar deportes acuáticos como el surf o el windsurf.

También hay que tener mucha precaución con el viento. La racha máxima registrada esta madrugada en Galicia fue de 160 km/h en Carballeda de Valdeorras, en la provincia de Ourense.

La flota de bajura amarrada

La situación complicada en el mar ha obligado a quedarse en tierra a los barcos de bajura de los puertos de la comunidad. En Cedeira y Espasante, por ejemplo, no han salido esta madrugada a pescar.

"No se puede estar ni en el puerto", cuenta en Herrera en Cope Ferrol Ricardo Villar, el patrón mayor de Cedeira. El mismo panorama en Espasante (Ortigueira). "No vamos a poder salir ni hoy ni mañana", lamenta José Luís Martínez, patrón de ese pósito.

Sí hay trabajo de la flota de altura y en los barcos que descargan en puertos como Burela o Ribeira.

Nevadas en zonas altas

Ciarán trae también las primeras nevadas del otoño a Galicia. Este jueves esperamos nieve en cuotas por encima de los 1.000 metros, en la zona más oriental de la comunidad.

En el resto, nubes y claros y chubascos intermitentes. El viento ha perdido intensidad, pero sigue notándose sobre todo en la costa Noroeste.

Desde primera hora se están registrando tormentas en la mitad norte.

El fin de semana esperamos otro temporal con lluvia y viento en Galicia. Llueve, además, sobre mojado. En zonas del interior de la provincia de Pontevedra se han acumulado en octubre más de 500 litros por metro cuadrado, lo que significa casi un tercio de lo que cae de media en todo un año.

Eso sí, esas precipitaciones han logrado revertir la situación de sequía que empezaba a preocupar en las ciudades gallegas. Toda Galicia ha salido ya de la situación de pre-alerta por sequía. Siguen los valores bajos en la zona de A Coruña y Arteixo y en Baiona, pero en los próximos días podrían ya normalizarse.