La policía podrá establecer controles en la vía publica
Especial atención tambien a la difusión de noticias falsas en la red sobre el coronavirus
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
“Adaptaremos el despliegue policial al nivel de civismo de la gente”. Así resume un alto mando policial a Cope, en una de las comunidades autónomas más afectadas por el coronavirus, el planteamiento con el que trabajan ya sobre el terreno las distintas policías llamadas a garantizar el cumplimento del estado de alarma en España.
Algunos problemas se daban esta mañana en Cataluña. Han sido muchos los barceloneses que se han desplazado a la zona litoral como un domingo más a pasar el día. Numerosos turistas salen a pasear por el centro de la Ciudad Condal sin más preocupación. Un integrante de la Guardia Urbana asegura a COPE que falta un trabajo de información previo a estos ciudadanos. “Quizás se debería concienciar bien a los hoteles para que adviertan con claridad a los clientes a lo que se exponen con su comportamiento”.
“Los agentes de la autoridad podrán practicar las comprobaciones en las personas, bienes, vehículos, locales y establecimientos que sean necesarias para comprobar y, en su caso, impedir que se lleven a cabo los servicios y actividades suspendidas en el Real Decreto”. Es lo que establece lo Orden emitida esta mañana por el ministerio del Interior para coordinar el trabajo de todos los cuerpos policiales en nuestro país, incluso de los vigilantes de seguridad, que pasan a depender directamente de Fernando Grande Marlaska.
Los ciudadanos podrán ser abordados a partir de este momento por agentes de la autoridad, condición que adquieren por el Real Decreto los miembros de las Fuerzas armadas, y requerirles datos sobre el desplazamiento que estén realizando. Se van a establecer dispositivos de seguridad fijos o móviles, tanto en espacios públicos como en la red de transportes, especialmente en franjas horarias en las que se registra la mayor afluencia de público.
La implementación de medidas, incluso en endurecimiento de las mismas, dicen nuestras fuentes en los operativos, depende de los objetivos prioritarios que establece la Orden ministerial se centran en garantizar la prestación o distribución de servicios y productos esenciales o en el control de los movimientos, destacando entre ellos, todo lo relacionado con los servicios sanitarios. Policías de cualquier uniforme darán seguridad en el entorno de los centros hospitalarios o centros de salud si son requeridos. Además, establecerán lo que llaman “corredores sanitarios” para permitir la entrada y salida de personas, materias primas y productos elaborados desde granjas, fábricas de piensos o mataderos. Con ese objetivo podrán realizarse escoltas a determinados transportes de abastecimiento, “como ya ha ocurrido durante alguna huelga general”, nos dice un comisario al frente de estos dispositivos.
Especial atención al suministro de energía y otras infraestructuras críticas. En ese frente podría contarse ocn el apoyo del Ejercito, cuyos integrantes pasan a tener la condición de agentes de la autoridad tras la publicación del Real Decreto. Mariano Casado, de la Asociación Unificada de Militares españoles, asegura que es obligatorio que los miembros de la FFAA que participen en el despliegue lleven una identificación fácilmente visible que les acredite como agentes de la autoridad.
La policía realizará también estos días un especial seguimiento de las redes sociales y la web para perseguir la difusión de noticias falsas, fake news, relacionadas con la crisis del coronavirus.
Todos los cuerpos policiales están conectados a través de sus representantes en el Centro de Coordinación Operativo y bajo el mando directo del ministro del Interior. Desde ese centro se supervisará, además, el estado de salud de los propios agentes, un elemento determinante para prestar con garantías el servicio que se les demanda ante la amenaza de la expansión del virus, también para ellos.
Precisamente el sindicato unificado de Policía (SUP) ha pedido que el ministerio de Sanidad corrija la nota emitida el pasado 11 de marzo en el que califico a los policías entre los funcionarios que tienen “una baja probabilidad por exposición” al virus. Entiende que el documento “ha tenido que ser un error” de los autores del documento, ya que un agente difícilmente va a poder mantener en su servicio la distancia que se establece como medida de seguridad respecto a los ciudadanos.
Precisamente la Orden de Interior recuerda que los policías también supervisaran que en lugares de culto o en velatorios se mantenga un nivel de ocupación que permita conservar un metro de distancia entre los asistentes.