Para Chema es una experiencia enriquecedora

El pasado día 10 paseaba a su perrita cuando se topó con una larga cola de gente que pedía comida bajo la lluvia a las puertas de la parroquia de Nuestra Señora del Aire. Pensó que tenía que hacer algo y llevó un carrito de comida a la parroquia. Llevado por un impulso también dejó un carrito en el portal del PAU de Carabanchel en el que reside con otros 300 vecinos y quince días después ya han llenado 10 carritos con comida, ropa e incluso otras cosas en las que quizás no pensamos como él mismo ha reconocido en Herrera en COPE. “Una familia limpió y esterilizó los biberones de sus hijos y los donó. Nos sorprendió pero cuando se los llevamos al párroco nos dijo que era una maravilla, algo muy necesario. Y no caes en ello”.

Chema nos contó su historia en Herrera en COPE hace dos semanas y su charla en la radio también ha tenido efecto en otras personas que han decidido seguir su ejemplo solidario como “un grupo de personas mayores que no pueden salir pero que elaboran menús que se los da a la policía para que los reparta”. Además, a los dos días de escuchar su historia en la radio otras comunidades de vecinos siguieron su ejemplo. Algo que reconoce que le emociona “porque es tan sencillo como dar un pasito y ha habido una avalancha de buenos propósitos increíble”.

Y se le nota la emoción en la voz “no solo porque uno mismo se siente enriquecido, sino por tu gente, por tu barrio”. Aunque también tristeza “por la pena de ver lo que pasa y te preguntas qué más puedo hacer”. “Tienes ganas de más”, asegura. Esta labor solidaria “Los Robles ayuda”, se puede seguir en Instagram.