El tercer anillo - Con Basket si hay paraíso
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El tercer anillo

Quién sabe por qué algo no funciona, la cosas en la vida no son como nos imaginamos, ni tampoco la mejor combinación posible es siempre garantía de éxito. Le puede haber ocurrido a usted mismo con un trabajo que le parecía ideal y no salió bien, con una relación que pensó que sería idílica y se rompió, una carrera que quiso estudiar y de la que se aburrió, el grupo de amigos con los que pensaba que congeniaba hasta que un día se dio cuenta de lo poco en común que tenía ya con ellos.
Por qué en el deporte lo que parece ideal acaba siendo un fiasco. Por qué la combinación Pau Gasol-Gregg Popovich no ha funcionado, por qué Pau Gasol ha jugado menos que nunca en San Antonio. Si aparentemente lo tenía todo para ser una sociedad fructífera. Un jugador inteligente en la madurez de su carrera en un equipo de autor, en un equipo moldeado por un entrenador de enorme carisma y experiencia que prima el colectivo. Un equipo que piensa, que hizo del pase su seña de identidad, que fue menos físico y más táctico, un equipo que no abusa del triple sino que mantiene su juego en la media distancia, que no es de ida y vuelta. Qué podía salir mal.

Pau Gasol debía aportar cabeza en una nueva etapa en los Spurs, debía ser el pegamento de un equipo competitivo con nuevas cartas en la era post Ginóbili-Parker-Duncan, primero con Kawhi Leonard y Aldridge y finalmente sin el primero y con DeRozan. Pero por delante de Pau estaba Aldridge, algo que se sabía, quizá se pensaba en un quinteto con dos altos, pero muy pocos juegan hoy con dos torres, así que Pau sería la segunda unidad, pero resultó que el austriaco Jakob Poeltl le pasaba por delante. Pau estaba jugando menos que nunca en su carrera y su rol no tenía nada que ver con el que nos tiene acostumbrados. Cuatro puntos por partido y 12 minutos por partido esta temporada en los Spurs. A Pau Gasol no le queda mucho tiempo en la pista, obviamente no podía, no quería, permitirse un año tirado a la basura.

A Pau Gasol le acaba de cambiar la vida como le ocurriera el 1 de Febrero de 2008 cuando le fue comunicado en Memphis su traspaso a los Lakers. Esta vez ha ocurrido tras ser contratado por Milwaukee tras conseguir un acuerdo de rescisión el último día hábil con los Spurs el 1 de Marzo. Así, Pau se incorporaba al mejor equipo de la NBA en este momento, Milwaukee Bucks. Algo tendrá el agua cuando la bendicen, las casualidades no existen, no es anecdótico pasar de ser jugador residual (o fuera de la rotación) en un equipo, a fichar por el mejor equipo de la NBA para abordar la lucha por el anillo. No se contrata por el pasado, pero sí teniendo en cuenta el pasado. A Pau les buscan para ganar el anillo. Significa que un jugador que no formaba parte de la reconstrucción de un equipo sí se ha considerado capital para nada menos que el asalto al título con otro equipo. Significa que los Bucks han visto en Pau la capacidad de ayudar a su equipo, no para pasear a una vieja gloria, no para que reciba el homenaje por las pistas como Wade y Nowitzki. No es el caso, Pau no ha comunicado cuánto le queda y nada hace pensar por ahora que esté pensando en colgar las zapatillas. Más bien al contrario, el mayor de los Gasol ve relanzado el sprint final de su carrera camino de los 39 con una oportunidad de oro, la oportunidad de luchar por su tercer anillo.

¿Qué ha visto Milwaukee que no viera San Antonio?  ¿qué ha visto de utilidad en Pau el discípulo de Popovich, ahora entrenador de los Bucks, el técnico Budenholzer? Milwaukee es un equipo más de ida y vuelta que San Antonio, más físico, un equipo mortal en transición alrededor de su eje, el jugador total Giannis Antetokounmpo, el mayor gigante que se ha visto correr una pista de baloncesto a ritmo de zancada de pequeño velocista. Milwaukee es el segundo mejor ataque de la liga, y su porcentaje de acierto en anotación es de los más altos por la gran cantidad de puntos que anota en la pintura con Antetokounmpo, Brogdon o Bledsoe atacando el aro. Como si fuera el mundo al revés, saca a su pívot, Brook López para que sea el tirador de tres siempre preparado. Pau Gasol llega para competir por ese puesto con el norteamericano de origen cubano. Los porcentajes de Pau en los años anteriores desde la línea de tres habían sido muy buenos, por lo que el reto no debe preocuparle.

Pero la aportación de Pau Gasol tiene que pasar sobre todo por su cerebro. Porque sabe jugar a baloncesto y entiende el juego, habrá que ver qué papel le da Budenholzer, es de suponer que querrá darle protagonismo y así lo ha hecho saber al hacer referencia a su experiencia en ganar campeonatos, que es algo de lo que adolecen los jóvenes Bucks, sólo con George Hill y ahora Pau con experiencia en finales.

Pau Gasol quiere volver a disfrutar del baloncesto el tiempo que le quede, y para ello es capital que esté bien físicamente y que entre en la rotación de los Bucks. En un equipo acostumbrado a que el balón esté mucho en las manos de Antetokounmpo, la estrella del equipo y que opta al MVP de la liga, Pau tiene una misión capital para dar soluciones al equipo que ha hecho enloquecer el norteño estado de Wisconsin y en una ciudad pequeña. En un lugar alejado del mundanal ruido y de las capitales de la NBA, ha emergido un equipo que va con decisión a pelear por el título del Este y a discutirle el anillo presumiblemente a los Warriors.

Estas cosas pasan en la NBA, para darnos cuenta de lo que es pensemos en que el San Pablo de Burgos o el Breogán estuvieran ahora mismo peleando por la ACB. Pau Gasol ha aterrizado de pronto en un equipo que le permite luchar por su tercer anillo, quién iba a decirlo tal y como iba la temporada, pero por qué será que a Pau el baloncesto siempre le acaba dando otra oportunidad.