A nadie le pasa inadvertido que lo natural es una de las tendencias más potentes en decoración para este año. Pero realmente esta vuelta a la esencia va mucho más allá. Se buscan espacios agradables, respirables, que nos hagan sentir nuestras raíces, y que humanicen la colonización tecnológica de nuestro día a día.
La naturalización de las estancias, la vuelta a lo artesanal, la utilización de materiales puros persigue un fin… alcanzar espacios saludables. “Cuando entendamos que el diseño y la arquitectura de un edificio influyen directamente en nuestra salud, habremos dado un gran paso para mejorar nuestra calidad de vida”, resume la arquitecto e interiorista Laura Gärna, de Gärna Studio. Y aunque no lo creamos tiene un nombre, el Síndrome de Deficiencia de Naturaleza, uno de los orígenes de muchas carencias emocionales de nuestro siglo. «Cada vez estamos más conectados a la tecnología y más desconectados de la naturaleza». De hecho el 90% de nuestro tiempo lo pasamos encerrados, algo a tener muy en cuenta ya que el entorno nos condiciona más de lo que nos imaginamos.
Llegado a ese punto, la solución pasa porque decoración e interiorismo busquen un crucial encaje con la naturaleza. Es por ello que debemos tener muy en cuenta varios aspectos a la hora de elegir y vestir nuestro hogar:
1.- Con vistas al sur.- Siempre que nos sea posible, debemos evitar comprar una casa con orientación norte, que está en sombra, mientras que el sur recibe la luz solar durante todo el día, recuerda Laura Gärna.
2.- Mejor exteriores, si se puede, claro.- Las viviendas interiores restringen la luz y crean un ambiente cerrado y claustrofóbico.
3.- Verde que te quiero verde.- Buscar la cercanía a zonas verdes, de parques y jardines, es importante a la hora de elegir casa.
Como alternativa si no es posible, o como complemento, resulta esencial “naturalizar»nuestra casa vistiéndola con plantas y flores… El interiorista Tristán Domecq, considera que «aportan ese toque acogedor que transforma una casa en un auténtico hogar”. Naranjos y limoneros son las plantas que recomienda para espacios exteriores, además de jazmines, bojs, camelios, hortensios y gardenias. Para interiores aconseja ficus, palmeras o potos.
4.- Luminosidad.– Debemos perseguir la luz. “Los tonos claros o los espejos que amplían el espacio son buenas soluciones para viviendas pequeñas”, señala Gärna.
5.- Materiales naturales: Entre un porcelánico y una piedra natural, elegir siempre lo natural. Buscar elementos que recuerden la naturaleza como maderas, mármoles, piedras, linos, algodones o tejidos naturales.
‘Muy mucho’ por ejemplo apuesta por tonos neutros y naturales para los utensilios de cocina en los que predominen la madera, la cerámica o la pizarra que acarquen el estilo y la tranquilidad del campo a nuestro día a día.
Uno de los materiales naturales que vuelve con fuerza a la decoración es el corcho.
En la imagen Tenvinilo ha creado una colección de vinilos con el efecto visual de este material que consigue decoraciones ligeras y actuales.
6.- Vuelta a lo artesanal. Volvemos a lo vintage, a lo elaborado con las manos de artesanos. Una tendencia que marca Francia, como país de origen de muchas corrientes en interiorismo y arquitectura, con tejidos naturales -como el ratán-, con materiales reciclados y recuperados y con la mezcla de lo antiguo con lo contemporáneo.
7.- Pigmentos naturales.- Garna apuesta por colores de tendencia como burdeos, rosas empolvados, tonos crema, pero siempre elaborados con pigmentos naturales.
‘Muy mucho‘ propone en sus accesorios para esta temporada el “Tierra & Fuego” con los colores de la madre tierra. Ocres, kaki y grises neutros, se mezclan y se combinan con tonos fuego como el teja. El ocre, el kaki y el gris que simbolizan la solidez y la estabilidad, mientras que el teja, aporta emociones intensas como la pasión y la fuerza, y darán ese toque alegre y optimista a la casa. Además incluyen textiles con lino y algodón
8.- Regreso a las raíces…. Lo podemos ver en la vuelta a elementos como el enamel, una aleación entre metal y porcelana que recuerda una cocina simple que viaja al pasado. Federica & Co propone una colección completa con este material.