En la Bundesliga germana está claro que el balonmano es una auténtica pasión por parte de los aficionados. Eso se refleja en el número de espectadores que cada jornada asisten a los pabellones. Hace unos días se hicieron públicas unas cifras de asistencia de espectadores a los pabellones de cada equipo de la Bundesliga.
Con una media de 4.617 espectadores, la Bundesliga ya tiene una media más alta que en los pasados meses de Diciembre y Febrero, incluso antes del tradicionalmente fuerte Diciembre. Sin embargo, esta cifra fue mayor en la racha final de liga de la temporada pasada. El calendario también influye, hasta ahora el Rhein-neckar Löwen sólo ha jugado cuatro partidos en casa. Una próxima semana el equipo de recibe al Leipzig y al THW Kiel. Hay buenas posibilidades de aumentar aún más la media de 5.780 espectadores, sobre todo porque ya no hay entradas a la venta para el partido contra el campeón alemán y, por tanto, el partido se disputará ante 13.200 espectadores.
Por su parte el THW Kiel (10.135) y el Füchse Berlin (8.371) ocupan ya tradicionalmente los puestos más altos de la liga. Magdeburg y SG Flensburg-Handewitt también reciben una media de más de 6.000 espectadores por partido. Además del Rhein-neckar Löwen, por encima de la media de la liga se encuentran el Hannover-Burgdorf (5.209) y el Erlangen (4.814). Por el contrario, cuatro clubes tienen actualmente una asistencia media inferior a 3.000 espectadores por partido. Además de los dos equipos ascendidos, Eisenach (2.621) y Balingen-Weilstetten (2.265), también están Wetzlar (2.868) y Bergische (2.499).
Si vamos a fijamos en las estadísticas de la temporada anterior, resulta que el Füchse Berlin y el Frisch Auf Göppingen pueden superar actualmente su media de más de 400 espectadores, con unos 300 espectadores más por partido en Leipzig y unos 200 más en Flensburg. Al Rhein-neckar Löwen, en cambio, todavía le faltan una media de unos 2.000 espectadores en comparación con la temporada pasada. Incluso en Hamburgo, que todavía no contaba con sus tradicionales viajes al Barclays Arena, el número medio de espectadores se redujo en unos 1.300. A Wetzlar le faltan unos 600 visitantes por partido, el BHC 300.
Unas cifras que dan mucha envidia verlas en comparación con nuestra Liga ASOBAL con asistencia a pabellones de 500, 800 y un máximo de 2000 espectadores como mucho. Cada día está más claro que esta Liga ASOBAL no interesa al aficionado general, salvo al apasionado del balonmano, por mucho que nos quieran vender el pollino sus actuales directivos y casi nulo el interés en los medios de comunicación en donde se ha convertido en una información residual.
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