El pasado día 15, en el XV Congreso de Escuelas Católicas, ante más de 2000 padres que la escuchaban, la Ministra de Educación, Isabel Celaá, leyó un texto que traía preparado: “De ninguna manera puede decirse que el derecho de los padres a escoger una enseñanza religiosa o a elegir centro educativo, podrían ser parte de la Libertad de Enseñanza. Esos hechos, los de elegir centro, formarán parte de la… de derechos que puedan tener los padres/madres, en las condiciones legales que se determinen pero no son emanación estricta de la libertad reconocida en el artículo 27 de la Constitución. De esto…” -….comienzan los murmullos cada vez más altos de los asistentes…. costándole seguir leyendo…- “…da cuenta la sentencia del Tribunal Constitucional de 1981”.
D. Luís Arguello, Secretario General de la Conferencia Episcopal, le ha respondido diciendo que espera sea un “lapsus”, argumentando que el artículo 27 de la Constitución tiene tres pilares básicos: “derecho a la educación, libertad de enseñanza y derecho de los padres”.
Por si sus declaraciones se deben a falta de conocimiento sobre la legislación, que para España es de obligado cumplimiento, le recuerdo lo siguiente: la Constitución española en el artículo 27.3, dice: “Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”.
El artículo 10,2 de la Constitución declara: “Las normas relativas a los derechos fundamentales y a las libertades que la Constitución reconoce se interpretarán de conformidad con la Declaración Universal de Derechos Humanos y los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas materias ratificados por España.” En 1977 el Gobierno español ratificó los acuerdos y pactos internacionales , que la Ministra está obligada a respetar.
En 1985, el Parlamento Europeo pide a España que se respeten los principios de la Resolución Luster sobre libertad de Enseñanza y añade: ”La Escuela Única del modelo socialista es menos democrática que el modelo progresista de Libertad de Enseñanza que existe en todos los países del mundo libre”.
El Consejo de Europa, en el artículo 2 del Protocolo Adicional al Convenio para la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales, firmado en Paris, en marzo de 1952, dice: “A nadie se le puede negar el derecho a la instrucción. El Estado, en el ejercicio de las funciones que asuma en el campo de la educación y de la enseñanza, respetará el derecho de los padres a asegurar esta educación y esta enseñanza conforme a sus convicciones religiosas y filosóficas”.
La Declaración de los Derechos del Niño, aprobada en la Asamblea de la ONU en 1959 advierte en su Principio 7, párrafo 2: “El Interés superior del niño debe ser el principio rector de quienes tienen la responsabilidad de su educación y orientación; dicha responsabilidad incumbe, en primer término, a sus padres”.
En 1948, en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en el artículo 26 punto 2, se afirma: “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos …”.
En el punto 3, se afirma: “Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos”.
La importancia de la Educación está presente en todos los países de Europa. Por eso, cuando algunas corrientes ideológicas pretenden utilizarla en su propio beneficio, surgen conflictos que han llegado, en ocasiones, a provocar enfrentamientos de una parte de la sociedad contra el poder establecido.
Sin duda el modelo educativo en España tiene que mejorar; hay que recrear la escuela, ofreciendo una educación más personalizada preparando a los alumnos según su vocación y aptitudes, para que puedan ser gestores de su propio futuro. Ese es el empeño de la mayoría del profesorado de todos los Centros públicos y privados.
El derecho de los padres de las Escuelas Concertadas en España está blindado con una sentencia a favor de la CONCAPA del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo.
No debemos olvidar que la Enseñanza es uno de los objetivos prioritarios del Marxismo. La izquierda concibe la Escuela como una plataforma de lucha. Como decía Gramsci: “Hay que apoderarse del terreno de la Cultura y de la Escuela para tener a futuro el poder.” En el último debate de los partidos políticos, en el minuto final para pedir el voto, entre otras cosas, Pablo Iglesias dijo: “Se está dando dinero a la escuela concertada en detrimento de la escuela pública” intentando sembrar así la animadversión hacia los centros concertados