Craviotto, Toro, Cooper y Germade elegidos para el K4 500 español
El embalse de Trasona, en Asturias, ha sido el escenario de una dificilísima elección. Siete eran los aspirantes a formar parte del K4 500 metros del piragüismo español. Solo podían quedar cuatro. Y así ha sido. Después de hacer varias combinaciones entre los siete candidatos, han resultado elegidos, Saúl Craviotto, Cristian Toro, Marcus Cooper y Rodrigo Germade. El primero, cuádruple medallista olímpico. El segundo y el tercero, campeones olímpicos en Río 2016 y subcampeones mundiales en 2017 junto a Germade y Carlos Garrote, uno de los tres palistas que se ha quedado fuera junto a Roi Rodríguez y Carlos Arévalo.
El cuarteto español competirá en la Copa del Mundo de Szeged (Hungría) entre el 18 y el 20 de mayo y en el Campeonato de Europa de Belgrado (Serbia) entre el 8 y el 10 de junio. Y si nada falla, parten con ventaja para representar a España en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Aunque aún están a mitad de camino, los cuatro piragüistas tienen muchas posibilidades de competir juntos en Japón. Sea cual sea el cuarteto final, buscarán una medalla que se le resiste al piragüismo español desde los Juegos de Montreal 1976. Intentarán subir al podio o al menos igualar aquella medalla de plata en K4 1000 metros, ganada por Herminio Menéndez, José María Esteban Celorrio, Luis Gregorio Ramos Misioné y José Ramón López Díaz-Flor.
En Montreal 76 comenzó la historia de amor del piragüismo español con los Juegos Olímpicos. Hasta hoy, catorce medallas, dieciséis si sumamos las dos de Maialen Chourraut en aguas bravas, adornan un palmarés sensacional. Los máximos representantes del piragüismo de nuestro país, han sido David Cal (cinco medallas olímpicas) y sigue siendo Saúl Craviotto (cuatro medallas) que buscará superarle en Tokio 2020.
Tres de los integrantes del K4 500 metros, saben lo que es ganar un oro olímpico. Dos de ellos (Craviotto y Cooper) han sido campeones de todo, es decir, tienen la triple corona (oro olímpico, mundial y europeo) de la que solo pueden presumir veintidós deportistas españoles. Y el otro, Rodrigo Germade, ya se ha colgado dos medallas mundiales y una europea. La veteranía de Craviotto (33 años) se une a la experiencia de Toro (26 años) y Germade (27) y a la juventud mezclada con experiencia de Cooper (23 años). Una mezcla que seguro dará muchas alegrías al piragüismo y al deporte español.
El cuatro veces medallista olímpico, Saúl Craviotto ha dicho que el K4 español impresiona mucho, pero que el curriculum no cuenta. «Cuando estás en el cepo de salida, nadie pregunta por cuántas medallas ha conseguido el barco. Hay que partir de cero y demostrarlo en cada competición. Ahora lo que falta es lo más fácil, trabajar y demostrar que se han ganado la plaza. Confianza absoluta y trabajar con humildad y con los pies en el suelo». «El plan está trazado para poder ir al Campeonato del Mundo de este año (agosto) y sobre todo al de 2019, clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020» ha declarado el palista leridano.