Quince años han pasado desde que Alejandro Valverde Belmonte ganó su primera medalla en un Campeonato del Mundo de ciclismo. Por aquel entonces solo tenía veintitrés años y consiguió la medalla de plata en Hamilton (Canadá). En 2018 busca el que sería el colofón a una carrera fantástica con un montón de triunfos en carreras de renombre y con seis medallas en Mundiales. Parece el gran momento, para que por fin, suba a lo más alto del podio. Todo indica que será la última gran oportunidad para que consiga el ansiado oro. Sería el sexto del ciclismo español en unos Campeonatos del Mundo de fondo en carretera.
Será en Innsbruck (Austria) el 30 de septiembre de 2018. Día marcado en el calendario de todos los que admiramos a Alejandro Valverde, con todos los respetos al resto de ciclistas españoles que van a participar. Todo el mundo coincide en que el circuito es muy duro. 265 kilómetros con un sube y baja continuo. Muy difícil de controlar. Con un desnivel acumulado de 4.670 metros y con la ascensión a un auténtico muro (Hungerburg) con rampas de hasta el 25%. Terreno soñado para que Alejandro Valverde haga algo muy grande y para que la selección española le ayude a cerrar el círculo.
España ha ganado veintitrés medallas en el Mundial de fondo en carretera. Casi la mitad las han conseguido entre Óscar Freire y Alejandro Valverde, cuatro el primero y seis el segundo. Freire ganó tres oros y un bronce. Valverde busca redondear su carrera deportiva con un primer puesto.
Valverde busca el sobresaliente en 2018
El 2018 del ciclista murciano no ha estado nada mal y si ganase el oro en Innsbruck se convertiría en sobresaliente. Tiene 38 años y en ocasiones ha parecido un ciclista joven con ganas de comerse el mundo. Quinto en La Vuelta a España con dos victorias de etapa y el maillot verde. Decimocuarto en el Tour de Francia. Victorias en la Volta a Catalunya, en la Vuelta a Valencia. También en el Tour de Abu Dhabi, la Ruta de Occitania o en el Gran Premio Miguel Induráin. Segundo en la Flecha Valona, quinto en la Amstel Gold Race. Un año notable para un corredor que está en los últimos momentos de su carrera deportiva.
Valverde llega a Innsbruck como número uno del mundo con 3.363 puntos. Por delante del italiano Elia Viviani con 3.271 y del francés Julian Alaphilippe con treinta puntos menos. Ojalá que el 30 de septiembre Valverde mantenga ese lugar en el ránking mundial y lo veamos como campeón del mundo. Seguro que el maillot arcoíris le sienta fenomenal.