“Renunciar a Tokio 2020 ha sido una decisión durísima”. Son palabras de uno de los mejores regatistas que ha tenido España. Fernando Echávarri Erasun (Santander, 1972) ha anunciado su retirada como deportista olímpico. Ni más ni menos que veinticinco años en la élite. Ha participado en tres Juegos Olímpicos. Campeón en Pekín 2008 en la clase Tornado junto a Antón Paz. Ambos fueron diploma al acabar en octavo puesto en Atenas 2004. En Río 2016 acabó en undécimo lugar junto a Tara Pacheco en la clase mixta Nacra 17.
El regatista cántabro deja la vela olímpica por un proyecto nuevo que le impide poder dedicarse totalmente a los Juegos de Tokio 2020. “Es un proyecto en el que estoy muy involucrado”. Junto a Tara Pacheco, estos dos últimos años han sido gloriosos y sabíamos los dos que si queríamos hacer medalla en Tokio teníamos que dedicarnos al cien por cien. Yo estaba dedicando mucho tiempo a otro proyecto» ha dicho en su homenaje en el Comité Olímpico Español. «Quiero apoyar a Tara para que siga nuestra senda, tiene mucho potencial y me quedo tranquilo”.
En el club de la triple corona
Echávarri forma parte del grupo de los veintidós elegidos del deporte español. El selecto club de deportistas que lo han ganado todo. De 2005 a 2008 consiguió la triple corona junto a Antón Paz en la clase Tornado. Campeones de Europa en 2005, campeones del mundo en 2005 y 2007 y campeones olímpicos en Pekín 2008 donde dominaron la clasificación de principio a fin. Paz ha agradecido a Echávarri la confianza que tuvo en él desde el principio, cuando consiguieron el sueño de estar en unos Juegos y ganar el oro olímpico. «Darte la enhorabuena por ese gran bagaje que has dejado en la vela española. Un abrazo fuerte a ti, a toda esa gente que te ha apoyado y que ha estado estos años colaborando y ayudando. Seguro que nos seguimos viendo en el mundo de la vela» ha dicho el regatista nacido en Madrid.
Un oro con brazaletes negros
El oro de Pekín 2008 significó el segundo de España en la clase Tornado , siendo el primero el de León Ballester en los Juegos de Atlanta 1996. Echávarri y Paz se resarcían así del octavo lugar de cuatro años atrás. La alegría en el podio estuvo empañada por el dolor que se estaba viviendo en España a causa del accidente de avión de Spanair. Ambos regatistas quisieron dedicar su título a las víctimas de Barajas y a sus familiares.“Por un lado es un gran día para nosotros, pero por otro un día de tristeza por todos los muertos. Les damos el pésame desde Qingdao”. Subieron a lo más alto del podio olímpico con brazaletes negros.
Cuando llegó el soñado oro olímpico el 21 de agosto de 2008 , Echávarri y Paz llevaban una década navegando juntos en la clase Tornado. Además del Europeo, los dos mundiales y de ser campeones olímpicos, en 2005 les concedieron el premio ISAF World Sailor of the Year Award. Campeones europeos y del mundo y además mejores navegantes del año merecidamente.
De Tornado a Nacra 17
El palmarés de Echávarri no termina ahí. Año más tarde emprendió un nuevo rumbo con Tara Pacheco en la clase Nacra 17. Junto a la regatista canaria ha obtenido dos excelentes resultados, subcampeones de Europa y del mundo en 2017.
La retirada de Echávarri ya la quisieran muchos deportistas. Deja la vela olímpica con excelentes resultados. En los últimos quince campeonatos internacionales se ha subido al podio en trece ocasiones. La vela le va a echar mucho de menos.