¡Mis queridos palomiteros! ‘Palomitas de Maíz’ cumple hoy 10 años: ¡muchísimas felicidades! ¡Estoy muy nervioso y muy contento! Y aquí seguimos, esperemos que por muchos años más a pie del cañón.
Y de nuevo os tengo que dar las gracias. ¡Qué poco creativo soy! Especialmente al exquisito equipo de la cadena COPE por soportar con paciencia y buen ánimo a este servidor de la palabra. Como me aseguraba el escritor Luis Español “dar las gracias es revolucionario”. Y es que dar las gracias es reconocer que sin vosotros no soy nada. No lo digo de modo gratuito. Sois vosotros, los palomiteros, los que hacéis que este rincón de cine evolucione con vuestras aportaciones.
Sin los lectores, o aquellas personas que estén al corriente del movimiento de Palomitas de Maíz a través de Twitter, Facebook, LinkedIn o Instagram, mi dedicación cinéfila no tendría ni sentido ni objetivo. Por eso también os doy las gracias.
Porque tras 10 años de presencia ininterrumpida en la red, ahí estáis. Sí, dispuestos a que este esclavo de la palabra intente poner algo de luz en el panorama cinematográfico. Bueno, siempre y cuando esta afirmación no suene muy osada. Un panorama, al tiempo, que también ha encontrado su vía de escape a través del teatro.
‘Palomitas de Maíz’ cumple hoy 10 años: ¡muchísimas felicidades! ¡Gracias, palomiteros!
Afortunadamente, cada año tengo que dar más las gracias a quienes habéis impulsado a Palomitas de Maíz desde las redes sociales. De este modo, el altavoz del que soy portavoz tiene más destinatarios, lo cual me obliga a realizar el trabajo con más interés y responsabilidad. Y con humildad, porque a estas alturas los méritos son siempre cosas del azar.
Este año, a las habituales distribuidoras que con tanto interés se preocupan por Palomitas de Maíz, es decir, Wanda Visión, Surtsey Films, Festival Films, Cameo o European Dreams Factory, entre otras, se suma otra con una propuesta renovada y atractiva que también apuesta por este producto. Me refiero a Bosco Films. Además de Goya Producciones, Avalon, Infinito+1… Y todo esto sin contar a las ‘major’.
Pero ver cine no lo es todo si no se cuenta con otros soportes para completarlo y estudiarlo mejor. Quiero referirme, en este sentido, a todas las aportaciones literarias que han favorecido ese encuentro entre la literatura y el cine. Gracias, pues, a la editorial Rialp, a Diabolo, a Anaya, a Cátedra, Encuentro, Alianza editorial, Acción Cine… (perdonadme si me dejo alguna, son los nervios del aniversario).
«Ver cine no lo es todo si no se cuenta con otros soportes para completarlo y estudiarlo mejor»
No puedo pasar por alto las publicaciones especializadas que me hacen hueco en los medios. Gracias a Aleteia, Ciudad Nueva, Pantalla 90, algunas de las cuales han tenido la inconsciencia de considerarme desde hace más de 17 años. ¡Soy un suertudo!
Y, como me refería al principio, también quiero hacer una mención especial a dos grupos de teatro, en los que me desarrollo como intérprete, y que vosotros, los palomiteros, habéis visto prodigar sus actividades desde este simpático areópago.
Me refiero a El Ateneo de Pozuelo y a Tassili Teatro. Gracias por vuestra acogida y por vuestra ayuda. También a Rutas con Historia. Y, en la línea de aportación teatral en materia de crítica no me olvido de Hoy en la City, hermoso escaparate donde detenerse para leer, exclusivamente, crítica de teatro.
Seguramente me dejo sin citar a un montón de personas relevantes en materia de cine o de teatro. Sólo os pido que aceptéis mi disculpa y que consideréis que vuestra ausencia en esta reflexión anual no es intencionada.
Brindo por todo ello, por tantas cosas buenas y bonitas, por tantas nuevas amistades y por todo lo bueno que aún tenemos que compartir juntos. Inevitablemente estoy muy contento y sigo muy nervioso.
Muchas gracias a todos por todo. Se os quiere… ¡Y hasta el año que viene!