Polígono de La Artística. Rodeado de la Avenida de Nostián. 31 naves. Más de 21.000 metros cuadrados. 15008.
De latas de conserva a rampas de skate
Los orígenes del polígono de La Artística se remontan a los años 60, cuando aquí se trasladaron desde Juan Flórez -entonces Camino Nuevo- las instalaciones de la Fábrica La Artística. Era una factoría de conservas. Pero aquí se hacían las latas, no lo de dentro. La empresa fundada por la familia Suárez Pumariega mantuvo la actividad en la zona hasta 1981, cuando presentó suspensión de pagos. En los siguientes años, las ruinas de La Artística serían refugio de chabolistas y un foco de tráfico de drogas. En el 1992, el polígono resurge. Comienzan a construirse las naves con las que cuenta actualmente.
De fábrica de latas se ha pasado a troquelados, carpintería, aluminios o hasta rampas de skate o un taller de coches. Son algunas de las empresas que conviven en este pequeño polígono privado que tiene sus ventajas respecto a estar en el centro de A Coruña o un área industrial mayor.
¿A Coruña o Arteixo?
El bus 6 de A Coruña para desde hace unos años cerca del polígono, en Meicende, aunque la mayor parte de los trabajadores viene en coche. Algunos son vecinos del entorno. Aparcar es fácil. Y la Tercera Ronda ha mejorado notablemente las comunicaciones hasta aquí.
En La Artística el ambiente es tranquilo, sin sobresaltos. Aquí todo el mundo se conoce. Las disputas sobre este lugar están, más bien, en las altas esferas. Ya desde su nacimiento, el ayuntamiento de Arteixo reivindicaba una zona que pertenece al término municipal de A Coruña. Esto es 15008. Nostián . Aunque paradójicamente, para llegar hay que atravesar Meicende y un cartel nos advierte de que los taxis abandonan la tarifa urbana.
El incendio que destrozó la Artística
Del deslinde pendiente se habló mucho antes de que La Artística renaciese, esta vez literalmente, de sus cenizas. La noche del 9 al 10 de mayo de 2009 un incendio arrasó 14 naves del polígono. Nunca se llegó a saber cuál fue el origen de unas llamas que obligaron a clausurar sus negocios a algunos empresarios y a mudarse a otros. Aquello fue un auténtico manual de mala gestión de emergencias. Al fuego llegaron efectivos contraincendios de cuatro ayuntamientos diferentes. Los bomberos de A Coruña, municipio donde paga impuestos el polígono, fueron los últimos en ser movilizados por el 112.
(imágenes de Seguridade Cidadá A Coruña)
Todo ello lo recuerda en esta entrevista Ricardo San Vicente, presidente de la comunidad de propietarios del Polígono de La Artística:
Así las cosas, las naves se volvieron a levantar y ahora nada hace sospechar lo que pasó hace una década en este polígono de proximidad y confianza. En las instalaciones reforzadas huele a barniz, a soldadura, pero también a un vecino muy próximo: la refinería. Sobre todo, cuando sopla el Nordés.