Ya ha empezado la New York Fashion week, que da el pistoletazo de salida a las semanas de la moda internacionales más importantes (la siguen, en orden cronológico Londres, Milán y París). Para que todos lo entendamos bien, esta semana en Nueva York, los diseñadores (en gran parte afincados en EEUU) nos presentan sus colecciones para el otoño/invierno que viene.
Muchos os preguntaréis por qué estamos viendo las tendencias para dentro de seis meses, y la respuesta es que desde que vemos la ropa en la pasarela hasta que llega a las tiendas hay todo un proceso de producción y distribución que no podemos olvidar. Y mientras se produce y se distribuye, las firmas se ocupan de promocionar sus colecciones en prensa, sobre celebrities y en eventos ‘ad hoc’.
¿Y qué podemos esperar de estas semanas? Principalmente mucha confusión: la información visual es desbordante y masiva, por lo tanto, las tendencias las veremos con más claridad cuando podamos dar un paso hacia atrás y ver el conjunto.
Aún así lo más divertido es sacar conclusiones diarias ya sean de la pasarela como del ‘streetstyle’ de la pasarela (o lo que es lo mismo: lo que llevan las invitadas a los desfiles), que deberíamos rebautizar ‘front row style’ (estilismos de primera fila… porque los que llevan las de la segunda no nos interesan… somos así de malas en la moda).
¿Las conclusiones de estos primeros dos días? En la pasarela aprendemos que se van a llevar las faldas largas hasta el suelo. No es mi prenda preferida, pero a algunas les favorece y les estiliza… o al menos eso deben de pensar los diseñadores que las han incluido en sus colecciones.
Y en la pasarela de la vida nos quedamos con el look de Elle MacPherson, con su chaqueta de pelo sintético, sus vaqueros desgastados de la firma de moda Met y sus botines rockeros.
Mañana más…