Ya están tardando en abrirle una cuenta de Twitter al hueso de la cadera de la modelo, o a su ingle -lo mismo da- ambas hicieron una aparición en la gala de MET. El vestido blanco que lució Anja Rubik, de Anthony Vaccarello, dejaba muy poco a la imaginación. Tan poco, que seguro que tuvo que pasar por el salón de depilación a que le hicieran las ingles brasileñas antes de poder ponérselo.
FOTOS: la ingle de la modelo Anja Rubik acompañada por Anja Rubik.
Después del fenómeno «pierna de Jolie», muchas famosas han aprendido que no hay como enseñar para hacerse notar. Lo de insinuarse parece que ya está demasiado visto, ahora hay que enseñarlo todo, hasta la cuenta bancaria.
Seguro que más de una pensó que iba a llevarse el premio a la más atrevida, Beyoncé con su vestido transparente que dejaba a la vista su gran «derrière», Camilla Belle con su escote vertiginoso, o Cameron Diáz con la espalda desnuda. Pero ninguna contaba con que la alfombra de la fiesta MET es el patio de juegos de las modelos (es una fiesta para celebrar la moda, después de todo)… y nadie sabe enseñar más y mejor que una «top», cuando se lo propone.