Quizás este titular necesite una pequeña traducción para los que no sean adictos a las redes sociales. Por partes. Los «fit selfies» son esas fotos que proliferan por la web cada vez más y que nos muestran a una persona haciendo deporte y viviendo una vida saludable.
Pero lejos de ser gente que se esfuerza por perder peso, como en ese programa de MTV «Ya no estoy gordo», las chicas tienen los glúteos detrás de las cervicales y los chicos unos abdominales marcados como el traje de Batman.
En el top 10 de los deportes están las pesas, el boxeo, el Pilates y el Yoga (que no es un deporte pero nos entendemos). No hay día que pase que no tenga que enfrentarme a una foto de una modelo de Victoria’s Secret, ultra tonificada, en su atuendo de gym (micro shorts y micro top – ¿quién entrena así?) o de Miranda Kerr haciendo el Saludo al Sol. Entre los expertos en Yoga se trata de fardar a ver quién se contorsiona más. Creo que los del Circo del Sol están haciendo «headhunting» gracias a Instagram y no Linkedin.
Así, muchas de las prendas para el verano 2014, como las de Gucci, están inspiradas en la ropa de gimnasio, con detalle de redecilla incluida. Se aproxima la primavera verano más «sporty» del siglo. Voy a invertir en unos guantes de boxeo para pegarle puñetazos al móvil cada vez que veo fotos de Izabel Goulart entrenando (pero sin rencor).