No tiene nada que ver con «bloquear» a alguien en Twitter. En moda, después de un año perfeccionando el «colour blocking» llega el «texture blocking». Si el primero definía el vestirse en «bloques de colores» (por ejemplo pantalones fucsia con top rojo y abrigo azul marino) el segundo define las nuevas prendas estrella de la temporada, las que están realizadas con mezclas de texturas.
El «textura block» es el siguiente paso al «colour block», el «colour block» en modo «hyper». En el desfile de Dsquared2 añadieron bandas de visón sobre sus vestidos de lana, en Marc Jacobs los chaquetones llevaban lana gruesa y paneles de pelo largo y en Proenza Schouler y en Louis Vuitton los vestidos estaban realizados con una mezcla de texturas, como el tweed y el cuero, a modo de patchwork futurista.
Y la palabra clave aquí es esa: futurista. Porque por mucho que podamos asociar lo de mezclar texturas con la tendencia bohemia, el «texture blocking» que hemos visto sobre la pasarela de otoño invierno 2014-15, no tiene nada de hippy chic. Es rico en materiales pero con una estética depurada.