Imposición del palio arzobispal a monseñor Carlos Escribano
El Nuncio del Papa ha impuesto el palio arzobispal a D. Carlos Escribanos, Arzobispo de Zaragoza, en una ceremonia celebrada en la Basílica del Pilar
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La Basílica del Pilar ha acogido la imposición del palio arzobispal a monseñor Carlos Escribano, Arzobispo de Zaragoza. Ha sido el Nuncio Apostólico en España, monseñor Bernardito Auza, quien ha realizado la imposición en un acto al que han asistido todos los obispos de las Diócesis de Barbastro - Monzón, Huesca y Jaca, Tarazona y Teruel y Albarracín.
El palio "es un elemento simbólico que recuerda lo que nos decía Jesús", ha afirmado monseñor Escribano. "Quien ejerce el ministerio episcopal, ejerce como un pastor y lo que hace es cargarse sobre los hombros esa oveja. Simboliza la oveja que carga el pastor sobre sus hombros. Es la filosofia del palio", ha afirmado el Arzobispo de Zaragoza.
Don Carlos Escribano ya recibió en el mes de junio el palio de manos del Papa Francisco. "Tradicionalmente se imponía en la Santa Sede por parte del Papa. Los arzobispos ibamos a Roma y se realizaba la imposición. El Papa Francisco lo cambió. La Iglesia Católica es muy grande y algunos arzobispos tenían problemas para desplazarse a Roma por lo que se optó por entregar el palio y que la ceremonia se hiciera en las Diócesis", ha afirmado el Arzobispo de Zaragoza.
En ese encuentro, el Papa Francisco le transmitió que "rezase por él, porque él iba a rezar por nuestra Archidiócesis de Zaragoza". Ahora es el Nuncio quien se desplaza a las Diócesis para, en nombre del Papa, realizar esta imposición. Así, esta es la segunda imposición del palio arzobispal que se vive en la Basílica del Pilar. La primera fue en 2016 con el anterior Arzobispo de Zaragoza, D.Vicente Jiménez.
UNA FECHA MUY ESPECIAL
Para monseñor Escribanos la imposición del palio arzobispal coincide además con el undécimo aniversario de su ordenación episcopal: "Ha coincidido la fecha. Hace once años que llegué a Teruel como Arzobispo. Salí de aquí de Zaragoza donde era parroco en Santa Engrancia y así empecé mi ministerio episcopal. Ahora, en el mismo día once años después, recibo el palio".
Don Carlos Escribano ha recordado además que este próximo mes de octubre vivirá su primera Día del Pilar como Arzobispo de Zaragoza: "No podemos celebrar plenamente las Fiestas, pero la tradición pilarista es un momento de mucha alegría para los zaragozanos. Personalmente para mi, que es la primera vez que voy a celebrar esta fiesta como Arzobispo, tengo una alegría interior muy grande. Viviremos lo que se pueda con toda la intensidad que se pueda".