El filósofo Gustavo Bueno, Hijo Adoptivo de Oviedo, cuenta desde este sábado con una plaza en la ciudad en la quepasó casi la mitad de su vida y con un pasodoble compuesto en su honor que ha sido interpretado en el Paseo del Bombé por la Banda de Música Ciudad de Oviedo.

El alcalde, Alfredo Canteli, ha presido el acto institucional con el que el Consistorio de la capital ha querido “saldar una deuda” que tenía con el filósofo Gustavo Bueno (Santo Domingo de la Calzada, La Rioja, 1924-Niembro, Asturias, 2016).

Apartir de ahora, el ‘padre’ del materialismo filosófico ya tiene su plaza en Oviedo, junto al palacete del antiguo Sanatorio Miñor, actual sede de la Fundación que lleva su nombre.

El pensador, Hijo Adoptivo de Oviedo, “se lo merecía", ha indicado el regidor, que ha incidido en que Bueno era "un asturiano nacido en La Rioja con más del cincuenta por ciento de su vida" en la capital del Principado.

"Felicidades a su familia –presente en el acto- y a todos los suyos por este homenaje que debería haber sido mucho antes”, ha indicado el primer edil durante el acto.

Tras el descubrimiento de la placa que lleva su nombre, el paseo del Bombé ha acogido un concierto en el que la Banda de Música Ciudad de Oviedo ha interpretado el estreno de un pasodoble en su honor, compuesto por Salvador Chuliá, que ha recibido una placa por parte del alcalde.