Los alumnos con discapacidad necesitan medidas especiales para volver a las aulas

Los colegios de Salamanca cuentan en la actualidad con un total de 1.118 alumnos con problemas de discapacidad de distintos tipos, que acuden a clases ordinarias de integración o bien a centros de educación especial. Estos escolares, que acudirán a sus clases presenciales a partir del 9 de septiembre, requieren de ciertas medidas que se adapten a su realidad dentro de la nueva normalidad.

Durante los peores meses de la pandemia, el colectivo ha seguido las clases telemáticas con enormes dificultades derivadas de las barreras de comunicación que se establecen en la interacción con los elementos tecnológicos que estos perfiles encuentran. Por eso se hace imprescindible para ellos recuperar la dinámica de asistencia a las aulas de manera presencial.

En todo caso, el protocolo que se ha establecido por parte de las autoridades sanitarias y educativas para el nuevo curso es insuficiente para atender las demandas de estas personas que a menudo requieren de medicación en su vida rutinaria. De modo que desde entidades como ASPACE Salamanca reivindican la presencia de una enfermera en las aulas que vele por su seguridad y garantice su protección frente al Covid. Esta figura existe actualmente en el colegio que la Asociación gestiona en Salamanca, pero son los propios padres los que tienen que afrontar el pago de la sanitaria.