El verano de 2019 fue muy movido en el Valencia CF. Con fichajes ahora inimaginables por sus cuantías (16 millones por Maxi, 12 por Thierry o 35 por Cillessen) y aterrizajes de jugadores imberbes cuya apuesta procedía del despacho de Pablo Longoria. Por esta vía llegaron Manu Vallejo desde Cádiz y Jorge Sáenz de Tenerife. Revelaciones de LaLIga Smartbank, aplaudidas en su momento, pero que pasado el tiempo se han revelado como claramente mejorables.

El caso del central canario es paradigmático. Por él se abonaron cuatro millones de euros y el club se quedó con la mitad de sus derechos económicos. Venía de hacer una gran temporada en el Rodríguez López, con 33 partidos disputados (todos ellos como titular) y de marcar cuatro goles. Buenos números para este internacional sub21 con España que tenía pinta de ser defensa para el Valencia CF durante años.

Sin apenas tiempo de pisar València, Sáenz fue cedido al RC Celta por dos temporadas (hasta 2021) con una opción de compra para el club olívico de siete millones de euros. Allí sólo jugó al principio de la temporada 2019-20. Con él en el campo, únicamente una victoria (0-1 en San Sebastián) en nueve choques.

En la temporada 2020-21 no jugó ningún partido

Y de ahí, al ostracismo. Sin entrar ni siquiera en las convocatorias y teniendo que entrenar al margen, se pasó en blanco la campaña 20-21. De hecho su último partido de celeste fue en julio de 2020 frente al CA Osasuna. Sus vivencias en Galicia las contó al marcharse.

Volvió a València, pero de manera testimonial. Hizo parte de la pretemporada con Bordalás, para volver a salir. En este caso, al Marítimo de Funchal portugués con el español Julio Velázquez como entrenador (que fue destituido en noviembre), donde se ha vuelto a repetir la historia. Empezó jugando hasta que dejó de hacerlo. No disputa ningún partido de la Liga del país vecino desde septiembre (contra el Sporting) y sus estadísticas son más que preocupantes: en los últimos 17 meses sólo ha completado los 90 minutos en dos ocasiones.

Tiene contrato con el Valencia CF hasta 2024, pero un futuro cada vez más remoto.