No es la primera vez ni será la última pero cuando se trata de fútbol la atención está más que asegurada. Nuevo caso de presunto amaño de partidos en Primera y Segunda División que ha llevado a los agentes de la policía nacional a la sede del Huesca. Ha sido una mañana frenética en busca de pruebas. La Operación Oikos sigue abierta y hay una decena de detenidos, entre ellos el presidente del Huesca, Agustín Lasaosa y el jefe médico, Juan Carlos Galindo, y varios futbolistas como el ex jugador del Real Madrid, Raúl Bravo considerado el cabecilla de esta presunta trama criminal. El mecanismo era muy sencillo, pactar el resultado de un partido para obtener beneficios desorbitados en apuestas on line, y buscar dentro del equipo en cuestión al sujeto o sujetos a corromper.
¿Cuál ha sido el origen de esta operación? Pues un partido entre el Huesca y el Nástic del 27 de mayo del pasado año en el que el equipo catalán ganó 0 a 1. El Huesca ya tenía asegurado el ascenso. No se jugaba nada. Y las alertas saltaban al detectarse apuestas muy elevadas que no encajaban con el tipo de encuentro y así lo denunciaba entonces en el Partidazo de Cope, Francesco Baranca, secretario general de Federbet, que es el organismo internacional que controla la buena praxis en las apuestas on line.
Pero claro, luego hay que encontrar las pruebas y en eso está la policía por orden del juzgado de instrucción número 5 de Huesca. Se habla de 100 mil euros por tongo, de jugadores que se dejan comprar porque cobran más así que con su propio juego.
Y en campo está ya Ciudadanos calculando el precio que pone a la llave que tiene para que otros puedan gobernar en comunidades y ayuntamientos. De momento sólo hay una cosa clara y es que los de Rivera van a entrar en todo ejecutivo posible. Y es que si no es así se juegan caer en la irrelevancia. A priori parece que el socio preferido es el PP, pero no hay que descartar que apoyen al PSOE en plazas como Castilla León y Aragón, porque la línea roja más que el PSOE, es Pedro Sánchez, así que los barones anti sanchistas, como el aragonés Lambán pueden tener posibilidades.