Declaraciones a la CADENA COPE de Luis Enjuanes, investigador del CSIC
"La 'Fiebre Hemorrágica Crimea-Congo', exige medidas biológicas extremas como con el Ébola"
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La Fiebre Hemorrágica Crimea-Congo es la causa confirmada del fallecimiento de una persona en Madrid y de que una enfermera que atendió a la víctima, se haya contagiado y esté siendo tratada en la UCI del Hospital Carlos III, una enfermedad que resulta letal en un 40 por ciento de los casos y para la que no hay vacuna ni tratamiento específico, hasta el punto de que las medidas de control para tratar con los pacientes y con las muestras médicas, exigen medidas de seguridad extremas similares a las que se toman en casos de Ébola, según datos de la Organización Mundial de la Salud. “Las dos enfermedades, el Ébola y el virus Crimea-Congo, son muy peligrosas, pero son diferentes porque las producen virus distintos. En ambos casos se producen hemorragias internas y en la superficie de la piel. Aún así, la patogenisidad y la transmisibilidad del Ébola se consideran superiores, pero como digo, ambas son muy peligrosas y los trabajos, con pacientes y muestras, han de realizarse con seguridad extrema y en laboratorios de contención biológica de nivel 3+ o 4, que es el máximo que existe”, declara a la CADENA COPE el profesor Luis Enjuanes, investigador del CSIC. Desde el Centro Europeo de Control de Enfermedades, se admite que “los seres humanos pueden ser infectados por el contacto con sangre de animales con viremia y por medio de la transmisión de humano a humano, en particular durante los brotes nosocomiales”, es decir, durante el tiempo que el infectado permanece en el hospital.“Así es, explica el profesor Enjuanes. Además, hay que decir que las garrapatas, llevan una cantidad enorme de virus. Por eso hay que educar a la población para el caso de que sea picada por una, lo mejor es reportar el caso en un hospital donde conocen técnicas para eliminarlas sin riesgos añadidos” “Nunca, añade, debemos quitarnos nosotros las garrapagtas, porque cuando las arrancas de la piel hacen una inyección de sus intestinos que lo menos que producen es una infección y aumenta la posibilidad de que nos transmitan una enfermedad viral”.A la pregunta de si cualquier garrapata que pueda tener un animal, incluso una mascota, puede contagiarnos la Fiebre Hemorrágica Crimea-Congo, Enjuanes responde que “no todas las garrapatas la transmiten. Lo hace especialmente una de las variedades y siempre que tenga ese virus lo cual no es lo habitual. Pero no solo está el Crimea-Congo, es que hay muchos virus que transmiten las garrapatas y de los que los propios virólogos no somos conscientes. Por eso, hay que tener una cultura de que una picadura de garrapata, siempre puede ser peligrosa y debe ser tratada en el hospital. Muchos de los virus que transmiten, producen infecciones en el sistema nervioso y las consecuencias son siempre graves”.Al contrario que en el caso del Ébola, que ya cuenta con alguna vacuna de probada eficacia y avanzado estado de pruebas, en el caso de la fiebre hemorrágica Crimea-Congo, no hay vacuna ni tratamiento específico. “La vacuna que está más adelantada, dice Enjuanes, es una desarrollada en Turquía y que está siendo analizada por la FDA, pero de momento no está en uso”.Por su parte, el departamento de salud del estado norteamericano de Washington, ha elaborado un informe en el que recuerda que “los virus de la fiebre hemorrágica Ébola, Marburg, fiebre de Lassa, Nuevo Mundo y de Crimea-Congo, pueden propagarse de persona a persona al tocar objetos contaminados por los fluidos corporales de un afectado” y añade que “puesto que puede transmitirse de persona a persona, la manera más efectiva de evitarlo, es aislar al enfermo, tomar precauciones para que el personal sanitario no se exponga al contagio y prestar especial atención a la eliminación de desechos médicos y tejidos de los infectados”.Al respecto, Luis Enjuanes, explica que “estos virus tienen un periodo de incubación que oscila entre 3 y seis días, dependiendo de la vía de contagio; más corto si es pos picadura porque pasa directamente a la sangre y más largo en el caso de contacto. En esos primeros momentos, es cuando la concentracion de virus es altísima y hace que sea el momento de mayor peligro para el contagio”. La propia OMS, en su manual de recomendaciones para los profesionales sanitarios, redunda en que, aunque no se ha demostrado que, la Fiebre Hemorrágica Crimea-Congo se pueda transmitir por vía aérea, es necesario extremar las precauciones y en caso de sospecha de un contagio, se debe aislar al paciente, utilizar inmediatamente un traje de protección individual para seguir atendiéndolo; avisar, sin demora, a los responsables de sanidad, evitar los pinchazos o traumatismos causados por objetos cortantes y punzantes que hayan estado en contacto con las personas afectadas, limpiar y desinfectar el entorno y eliminar adecuadamente los desechos.... Además, recomienda otras precauciones estándar, como prohibir el acceso a las zonas de cuidados salvo a las personas indispensables; hacer un registro de todas las personas que entren en la zona en la que permanece la persona afectada; vigilar que cualquier persona que se acerque a la persona infectada, utilice trajes de protección individual; colocárselos de manera correcta y al quitárselos hacerlo siguiendo el protocolo de máxima seguridad, similar al que se sigue en otros casos como el Ébola o el Marburg. Sobre esto, Luis Enjuanes, incide en que ante un posible caso de contagio por virus Crimea-Congo, “lo primero que debe hacer el personal sanitario, es protegerse él, proteger al resto, avisar a los servicios de salud y trasladar con los medios de protección necesarios al paciente hasta una unidad especializada” . Sobre el traslado de muestras para analizar, el profesor Enjuanes explica que “suelen ir al centro de Majadahonda donde hay varios laboratorios de alta seguridad. Es un traslado que está perfectamente regulado por unos protocolos y las muestras no las puede trasladar cualquiera, sino que tiene que hacerlo una compañía especializada, en España solo hay una, y el envasado implica al menos 4 recipientes uno dentro de otro con alta resistencia, que en caso de accidente no permitiría que el virus se disemine, porque lleva, además, agentes absorventes. Son traslados de alta seguridad y muy caros”.El Centro Europeo para el Control de Enfermedades ECDC, recuerda, por su parte, que “el diagnóstico fiebres hemorrágicas, se tiene que hacer en el nivel de bioseguridad de alta contención 4, un nivel que alcanzan muy pocos laboratorios”, e informa de que en 2014, se confirmaron cuatro casos en Bulgaria donde hubo otros cuatro no confirmados9 y un caso confirmado en el Reino Unido y que la fiebre hemorrágica Crimea-Congo, es endémica en la región de los Balcanes y Bulgaria, donde informa periódicamente un pequeño número de casos (seis casos en 2010, cuatro en 2011, cinco en 2012 y ocho en 2013). Otros lugares de Europa en los que se han confirmado casos de infección humana, son Albania, Grecia, Kosovo, Serbia, Turquía, que sigue siendo el país más afectado; Armenia, Georgia, Ucrania, Federación de Rusia, así como de Kazajstán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán."La 'Fiebre Hemorrágica Crimea-Congo', exige medidas biológicas extremas como con el Ébola"