CORONAVIRUS CULTURA (Resumen)

Ayudas a la Cultura: De la satisfacción del cine a la decepción de la música

Las ayudas urgentes para el sector de la Cultura aprobadas este martes por el Gobierno han provocado una enorme diversidad de reacciones, que van desde la satisfacción del cine a la decepción de la industria musical y del arte, pasando por el teatro, "moderadamente" de acuerdo con las medidas.,Representantes de los sectores afectados, consultados por Efe, han reaccionado con alegría, tibieza o enfado a la aprobación por el Consejo de Ministros de un Real Decreto que destina

Agencia EFE

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Las ayudas urgentes para el sector de la Cultura aprobadas este martes por el Gobierno han provocado una enorme diversidad de reacciones, que van desde la satisfacción del cine a la decepción de la industria musical y del arte, pasando por el teatro, "moderadamente" de acuerdo con las medidas.

Representantes de los sectores afectados, consultados por Efe, han reaccionado con alegría, tibieza o enfado a la aprobación por el Consejo de Ministros de un Real Decreto que destina 76,4 millones de euros para "defender" la Cultura; que da acceso extraordinario a la prestación por desempleo para los trabajadores del sector y que aporta 20 millones de euros a la sociedad de garantía recíproca CREA SGR para habilitar líneas de crédito de hasta 780 millones.

Pero que no incluye muchas de las medidas propuestas en reuniones previas por sectores como los de la música y las artes visuales, los más críticos con el texto aprobado hoy.

La industria musical se siente "muy decepcionada" porque las medidas "llegan tarde y vuelven a ser insuficientes" en comparación con Europa.

Así lo ha manifestado Es_Música, federación que engloba a las nueve asociaciones más importantes del sector y que ha lamentado en declaraciones a Efe que se hayan quedado fuera muchas de sus principales demandas, como la aplicación de la fuerza mayor que les ampare legalmente por ejemplo para resolver contratos con artistas.

Y tampoco comprenden desde esta federación que no se recogieran "cuestiones de carácter puramente regulatorias" en las que ya se ha trabajado junto al Inaem (Instituto Nacional de Artes Escénicas y de la Música), como la adaptación de los ERTE al sector (sobre todo, que se consideren ERTE de fuerza mayor cuando acabe el estado de alarma, ya que la música seguirá parada).

Respecto de la partida presupuestaria consignada para ayudas, de más de 38 millones -para la música y las artes escénicas-, Martínez ha considerado que ese dinero "no cubre las necesidades del sector" y ha pedido conocer "las reglas de juego" sobre cómo las va a canalizar el Inaem.

Asimismo, desde la Mesa Sectorial del Arte Contemporáneo se han mostrado "totalmente decepcionados" por lo anunciado hoy por el Ministerio de Cultura, a la espera de ver el texto definitivo del BOE.

"Esperábamos mucho más porque nos escucharon en las reuniones mantenidas con Hacienda y Cultura. Cada una de las asociaciones que forman la mesa preparó un informe y ahora volvemos a ser una vez más el sector olvidado", explicó a Efe María José Magaña Clemente, representante de Mujeres en las Artes Visuales.

Con un millón de euros, que son las ayudas directas aprobadas para el sector del arte y que son para "la promoción del arte contemporáneo", no se llega a los artistas, galeristas, críticos, a la digitalización o a la creación.

Hay que tener en cuenta que el sector de las artes visuales tiene una mayor precariedad que otros ámbitos culturales y que no hay grandes empresas que se puedan beneficiar de las líneas de crédito. "¿Qué artista va a poder pedir un crédito", se ha preguntado Magaña, que ha reiterado la necesidad de ayudas directas y de una renta básica para los artistas como se han aprobado en otros países europeos.

La Mesa Sectorial del Arte Contemporáneo, integrada fundamentalmente por autónomos y empresarios, había solicitado suspensión de cuotas de autónomos, bonificaciones para trabajadores asalariados; acceso a ayudas a fondo perdido y créditos blandos o ayudas para arrancar exposiciones congeladas por las crisis.

Otro de los sectores críticos pero menos ha sido el del teatro, que, en palabras del presidente de la Federación de Asociaciones de Empresas de Teatro y Danza (Faeteda), Jesús Cimarro, está "moderadamente" satisfecho.

Aún así, Cimarro ha confesado que tiene "la esperanza" de que se puedan implementar pronto otras medidas "fundamentales" para superar la crisis y ha puntualizado que su sector necesita más recursos y que, por ejemplo, se prolonguen los ERTE.

La satisfacción sube de nivel en el sector del cine y desde la Unión de Actores, su secretario general, Iñaki Guevara, ha considerado muy positivo el hecho de que por primera vez se tenga en cuenta la "intermitencia" que rige los contratos de los trabajadores artísticos y se les permita acceder a las prestaciones por desempleo.

Eso sí, ha lamentado que no se haya incluido su petición de crear una ventanilla única en el Servicio Público de Empleo para los artistas, con funcionarios especializados para agilizar el cobro de las prestaciones y que no se demoren meses.

Por su parte, Borja de Benito, portavoz de la federación de exhibidores de cine (FECE), también ha valorado las ayudas directas que este subsector recibirá por un importe de 13,25 millones de euros para financiar la puesta en marcha de los nuevos protocolos de seguridad e higiene en las salas por la COVID-19 y las campañas promocionales para fomentar el regreso del público a las mismas.

"Es la primera vez que los exhibidores reciben algún tipo de ayuda directa del Gobierno", ha destacado a la vez que ha pedido también la complicidad y el apoyo de comunidades autónomas y ayuntamientos de cara a la reapertura.

De Benito ha recordado que aún hay mucha incertidumbre con respecto a cuándo van a poder reabrir las salas, algo previsto en la fase 2 del plan desescalada del Gobierno, que como pronto sería a partir del 25 de mayo.

Y los productores de cine agrupados en PIAF (Productoras Independientes Audiovisuales Federadas) ven las medidas "muy correctas y muy en la línea de lo que nos conviene como punto de partida", en palabras de su presidenta, Puy Oria.

Con optimismo está también el sector del libro, que ha considerado que las medidas aprobadas este martes son positivas pero insuficientes para afrontar la caída de los ingresos prevista y para asegurar la pervivencia de las empresas del sector, según la Asociación de Cámaras del Libro de España.

Por ello siguen reclamando la aprobación de medidas adicionales urgentes como la puesta en marcha de un programa de compras públicas de libros destinados a las bibliotecas públicas, universitarias y escolares a través de las librerías de proximidad, para lo que sería necesario modificar la normativa referida al contrato menor o la aprobación de un bono-libro que permita incentivar el consumo de libros tras la reapertura de las librerías, entre otras.

Y para Carlota Navarrete, directora de La Coalición de creadores e industrias de contenidos, las nuevas medidas han sido recibidas "positivamente", aunque al igual que el sector del libro esperan "más decisiones que refuercen este primer paquete y puedan incorporar cuestiones importantes que se han quedado en el cajón en esta ocasión".