Así fríe a impuestos la Generalitat a los catalanes frente al "paraíso fiscal" de Madrid
Cataluña es la región española con más impuestos y Madrid, la de menor presión fiscal. En plena pandemia, la Generalitat ha decidido subirlos aún más y crear algunos nuevos
Madrid - Publicado el - Actualizado
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"Dumping", paraíso fiscal... ERC ha puesto la política de impuestos de la Comunidad de Madrid en el punto de mira. Gabriel Rufián anunció este martes un preacuerdo con el Gobierno de coalición sobre los Presupuestos Generales de 2021, que incluía la creación de una comisión bilateral que busca acabar con lo que ha definido como el "paraíso fiscal" de Madrid. El "dumping" que achacan al gobierno regional respecto a otras comunidades y que, a su juicio, "supone un grave perjuicio para la clase trabajadora en un momento de emergencia social".
Rufián asegura que a esa comisión acudirían expertos en la materia que comprendan que no se pueden seguir aplicando las recetas que sucedieron a la crisis de 2008, pero que los detalles se concretarán más adelante. Eso sí, rehusó desvelar cómo puede el Gobierno acabar con el "dumping fiscal" madrileño: "Si lo digo, es que no se hace", se justificaba.
Lo cierto es que Cataluña es la región española con más impuestos y Madrid, la de menor presión fiscal. De hecho, Cataluña es de las pocas regiones que ha decidido este año subir los impuestos en plena pandemia del coronavirus multiplicando el Impuesto de Sucesiones e incrementado el IRPF para las rentas altas y transmisiones patrimoniales. Más carga fiscal para una Comunidad Autónoma que ya fríe de sobra a impuestos a sus ciudadaos.
Según el Panorama de la Fiscalidad Autónómica y Foral 2020, presentado el pasado mes de marzo, la Generalitat catalana es la que más tributos propios tiene con un total de 18. Desde el canon del agua hasta el impuesto sobre viviendas vacías, pasando por los de grandes establecimientos comerciales o el que grava los activos no productivos de las personas jurídicas. A estos se deben sumar desde este año el impuesto sobre instalaciones que inciden en el medio ambiente, aprobado este verano, y el de bebidad azucaradas que el Gobierno central también quiere incorporar a los Presupuestos Generales del Estado.
El presidente de la patronal catalana Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ya lamentó en enero que los catalanes tuvieran que pagar hasta más del 90% más que los madrileños si se cumplía el aumento de la presión fiscal. Según sus estimaciones, los catalanes pagan un 40% más que los ciudadanos de Madrid entre Renta y Patrimonio -impuesto este último que no se paga en la comunidad madrileña-, un 66% más en transmisiones patrimoniales, y un 233% más en actos jurídicos documentados, además de que los catalanes pagan Sucesiones y Donaciones, y los madrileños no.
IRPF, PATRIMONIO Y SUCESIONES...
Con respecto al IRPF, Madrid es la que menos grava a las rentas bajas y altas. Por el contrario, Cataluña es la que más dinero quita a los tramos de 20.000 y 30.000 euros y la que más grava a las rentas altas, sólo por detrás de Navarra. Pongamos un ejemplo: un contribuyente que gana 30.000 euros brutos al año, en Madrid pagaría 4.795 euros. En Cataluña le tocaría desembolsar 5.102 euros. Es decir, un catalán pagará 307 euros más que un madrileño. En lo que se refiere a una renta alta superior a 600.000 euros al año, la diferencia es aún mayor. Un residente pagaría en Madrid 249.385 euros de IRPF, mientras que en Cataluña abonará 270.467 euros. Hay una diferencia de 21.082 euros entre ambas comunidades.
En lo que se refiere a impuesto de Patrimonio, Cataluña es también una de las regiones con mayor carga impositiva en este aspecto mientras que Madrid estableció en 2008 una bonificación del 0%. Es decir, no se paga nada. Los patrimonios de 800.000 euros en Cataluña pagarían 769,51 euros, los de 4 millones abonarían 41.943,7 euros y los de 15 millones un total de 418.155,6 euros, en estos dos últimos casos las mayores cantidades de España.
Precisamente este año Cataluña ha incrementado el IRPF a las rentas altas y el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, así como el de Sucesiones. Para el Impuesto de Sucesiones, a un soltero de 30 años que herede bienes paternos por valor de 800.000 euros, de los que 200.000 corresponden a vivienda habitual, tendrá que pagar 9.796 euros en Cataluña, frente a los 1.586 euros de Madrid, según el panorama de fiscalidad de los economistas.