OBITUARIO NICOLÁS REDONDO

Nicolás Redondo, biografía de una vida dedicada a la UGT

Estos son algunos datos de la extensa biografía de Nicolás Redondo Urbieta, fallecido en Madrid a los 95 años tras una vida dedicada a la Unión General de Trabajadores (UGT).

Agencia EFE

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Estos son algunos datos de la extensa biografía de Nicolás Redondo Urbieta, fallecido en Madrid a los 95 años tras una vida dedicada a la Unión General de Trabajadores (UGT).

1945/ Se afilia a las Juventudes Socialistas y a UGT.

1970/1977/ Miembro de la Ejecutiva del PSOE.

1976/ Elegido secretario general de UGT.

1977/ Diputado del PSOE por Vizcaya.

1979/ Reelegido diputado del PSOE por Vizcaya.

1986/ Renovó su escaño del PSOE por Vizcaya.

1987/ Renuncia al escaño de diputado.

1988/ Huelga general convocada por UGT y CC.OO.

1989/ Elegido vicepresidente de la Confederación Europea de Sindicatos.

1990/ Reelegido secretario general de UGT.

1994/ Cesa al frente de la Secretaría General de UGT.

Nicolás Redondo Urbieta nació en Baracaldo, Vizcaya, el 16 de junio de 1927 en el seno de una familia vasca de clase obrera. Su padre era trabajador de Altos Hornos, miembro del Partido Socialista y militante de la UGT; fue juzgado y condenado a muerte, pero se le conmutó la pena por la de 30 años de cárcel, de los cuales cumplió 6 en el penal del Puerto de Santa María (Cádiz). Finalmente, murió en 1969. Su madre falleció a los pocos meses de nacer Nicolás.

A los 10 años, en 1937, fue evacuado con otros niños vascos en el buque "La Habana" y llevado a Burdeos (Francia), donde le recogió una familia minera de origen español, con la que convivió hasta 1940 cuando regresó a España al término de la Guerra Civil.

Fue el primer delegado obrero que representó a España en la 63 Conferencia anual de la OIT, tras el final de la guerra civil, y trabajó como obrero especialista en la Naval de Sestao hasta 1969.

Durante la dictadura fue detenido y encarcelado catorce veces por sus actividades políticas y sindicales. La última detención fue en 1973: pasó cinco meses en prisión (de los que 40 días estuvo en celdas de castigo) de los dos años y medio de condena dictada por el Tribunal Supremo; pero pasó el resto de la sentencia en libertad condicional. En 1975 se benefició del indulto a presos políticos.

Paralelamente, Nicolás Redondo pasó a ocupar puestos relevantes tanto en el Partido Socialista Obrero Español como en UGT.

Fue un miembro destacado del PSOE en el País Vasco, y como tal asistió al XXVI Congreso del Partido, celebrado en Suresnes, Francia, en octubre de 1974. En él, renunció a la secretaría general y propuso para el cargo al entonces joven Felipe González. Con este gesto, Redondo consiguió que los opositores se integraran en una candidatura única, encabezada por González.

En 1976, en el XXX Congreso de la UGT en Madrid, fue elegido secretario general, y en el XXVII Congreso del PSOE, vocal de la Comisión Ejecutiva.

Redondo, que en los sucesivos Congresos ugetistas siempre resultó reelegido secretario general del sindicato socialista, vio cómo su relación con el PSOE se fue deteriorando hasta que en diciembre de 1977 dimitió de la Ejecutiva del Partido, a la que pertenecía desde 1970.

En las elecciones generales de 1977, 1979, 1982 y 1986 fue elegido diputado del PSOE por Vizcaya, Pero en octubre de 1987 formalizó la renuncia a su escaño en el Congreso de los Diputados argumentando que "no podemos defender como sindicato un criterio y otro distinto el grupo parlamentario".

Como secretario general de UGT firmó varios acuerdos con la patronal y con los sucesivos gobiernos de la democracia. Los más importantes han sido los pactos de la Moncloa (octubre de 1977), el Acuerdo Nacional de Empleo (9 de junio de 1981) o el Acuerdo Económico y Social (9 de octubre de 1984).

Sin embargo, a partir de 1986 las relaciones de la UGT y su líder, Nicolás Redondo, con el gobierno de Felipe González se fueron deteriorando. Ese año había demostrado claramente su postura contraria a la entrada de España en la OTAN.

También destacó el enfrentamiento entre las reivindicaciones para la clase obrera solicitadas por UGT y la política económica defendida por el Gobierno y representada por el entonces ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga.

Nicolás Redondo optó por mantener una línea sindicalista dura sin hacer concesiones al Gobierno y sin dejarse coaccionar por la disciplina del Partido Socialista.

La oposición de la UGT a la política económica del Gobierno socialista alcanzó su punto álgido con la huelga general del 14 de diciembre de 1988, convocada por UGT y Comisiones Obreras. A partir de entonces se fue ensanchando la brecha abierta en 1987 entre UGT y PSOE.

El 8 de junio de 1989 fue elegido, por unanimidad, vicepresidente de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), organización que agrupa a 36 confederaciones sindicales de toda Europa.

En octubre de ese mismo año, UGT y CCOO pusieron en marcha la unidad de acción sindical con la firma de la Plataforma Sindical Prioritaria (PSP), en la que se recogía una veintena de reivindicaciones sociales y que sirvió de base a las negociaciones para la concertación social con la patronal CEOE y el Gobierno en 1990.

En 1990, Redondo fue reelegido secretario general del sindicato, con el cien por cien de los votos, y en 1993 comunicó a la comisión ejecutiva y al comité confederal de UGT su intención de no presentarse de nuevo al cargo.

En el Congreso Confederal de 1994, Cándido Méndez fue elegido nuevo secretario general del sindicato, con el apoyo de Redondo.

Desde entonces, Nicolás Redondo se apartó de la vida pública.

En el último año de su mandato como secretario general de la UGT, Nicolás Redondo sufrió el escándalo provocado por la gestión económica de la cooperativa de viviendas PSV, integrada en el grupo IGS, en el que el sindicato tuvo una participación del 47 por ciento. UGT reconoció un "déficit económico" de unos 14.000 millones de pesetas.

En julio de 1994 declaró como imputado ante el juez de delitos monetarios, Miguel Moreiras en la Audiencia Nacional, asistido por Leopoldo Torres, ex fiscal general del Estado. Después de tres días de declaraciones quedó en libertad sin cargos.

En junio del año 2000 volvió a declarar, esta vez como testigo, en el juicio de la PSV ante la Audiencia Nacional, en el que aseguró que el sindicato no participaba en la gestión de la cooperativa.

Uno de sus dos hijos, Nicolás Redondo Terreros, ha sido diputado y secretario general del PSE-EE-PSOE.