¿Es posible que suframos un gran apagón en España como para el que se prepara Europa?: “estamos muy lejos”
Algunos países europeos están tomando medidas ante un posible corte del suministro energético y hablamos con el catedrático Alberto Abanades para darnos las claves
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Sin teléfonos móvil, sin luz, sin calefacción y sin comunicaciones, o, lo que es lo mismo, una caída de la red energética sin precedentes. Para eso es para lo que se está preparando Europa en este invierno que llega en apenas un par de meses.
Y es que la guerra en Ucrania ha provocado una psicosis en las principales ciudades del continente por si el conflicto se alarga y Rusia continúa cortando el suministro de gas a Europa.
Todo ello llevaría a un gran apagón en el que localidades enteras queden sin energía y tengan que subsistir por sus propios medios. No es baladí que en lugares como Alemania se ha disparado la venta de leña para hacer frente a un invierno en el que no saben si van a poder contar con calefacción.
De hecho, países como Reino Unido o Francia han empezado a tomar medidas ante un posible apagón y a avisar a sus ciudadanos que ese escenario es una posibilidad no tan remota.
Vamos por partes: Reino Unido, por ejemplo, ha advertido de que, si la cosa se pone lo suficientemente seria y Rusia corta el suministro de gas, harán cortes de energía de tres horas.
En el caso de Francia, alertan de que podrían llegar a cortar el suministro de energía durante dos horas avisando previamente a los ciudadanos. Añaden, además, que estos apagones irán rotando en distintas partes del país y que los servicios esenciales como los hospitales o la policía no se verán afectados.
Otros países, sin embargo, ya están pidiendo a sus habitantes que, en la medida de lo posible, se aprovisionen de linternas y de mantas. Pero, ¿son exageradas esas medidas?
Alberto Abanades es el Coordinador del Máster de Ingeniería de la Energía en la Universidad Politécnica de Madrid y es también catedrático de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de Madrid. Él nos ha contado las claves de este posible apagón a nivel europeo.
“Depende mucho del país y de la estructura de su sistema eléctrico. Un gran apagón, en un funcionamiento normal del sistema, es prácticamente imposible” comenzaba contándonos.
Nos cuenta que, un apagón sería posible si hay ciertos accidentes en las infraestructuras que produzcan problemas, algo que nos recuerda que pasó en Atocha hace unos años cuando se quemó un transformador. Una situación así, podría provocar un efecto dominó que dejase a ciertos lugares sin luz durante unas horas.
Algo que no es lo mismo que un gran apagón en Europa y, mucho menos, en España.
¿Es posible que España sufra un “gran apagón” durante el invierno?
“En España yo creo que no es posible, porque el impacto que tienen las centrales de gas, desde el punto de vista de cantidad energía generada, es pequeño. Se podría cubrir con otras fuentes” dice Alberto Abanades respecto a un gran apagón si Rusia corta el suministro de gas. Eso sí, con algunas excepciones como bien dice en este audio.
Podría pasar, como proponen países de Centroeuropa, que se dé un apagón controlado en el que se racione la energía. “Se da y se prevé actualmente que se dé en algunas industrias, a pequeña escala, en la que para tener un precio menor de la energía eléctrica, acceden que durante un tiempo determinado a que se le interrumpa el suministro” comentaba.
Algo que ocurre en Venezuela o en países donde debe haber un racionamiento de ese suministro, un escenario que puede pasar cuando “el sistema no sea capaz de cubrir la demanda que se prevé”.
Pero, como bien comenta el catedrático, en España “estamos muy lejos” de que esa situación se dé. No cree que las medidas que están tomando en países como Reino Unido sean exageradas, pero hay que tener en cuenta que no podemos compararnos.
“España, aunque haga frío en invierno y haya zonas muy frías, no es comparable con la necesidad de energía que pueda haber en otros países. Aquí tenemos mucho más sol, no estamos en la misma situación” nos comentaba.
Unas medidas para cuidar el medio ambiente
De momento, tal y como nos explicaba el catedrático Alberto Abanades, podemos estar tranquilos durante este invierno ante un posible apagón.
Pero, como nos ha señalado, algunas medidas que se toman de racionamiento de ese suministro energético pueden llegar a ser buenos para cuidar el medio ambiente y ahorrar una energía que, cada vez, se torna más cara.
“Toda gestión energética incluye una gestión racional del consumo. Puede haber situaciones en donde no sea necesario ese consumo, como hacer que calderas comunitarias, en lugar de empezar el 1 de noviembre, empiecen el 12” apuntaba.
Medidas que no tienen por qué estar ligadas con una catástrofe como un gran apagón europeo, si no con el cuidado de nuestro entorno y el ahorro energético.
Un ahorro que ya se está llevando a cabo en distintas comunidades y que puede ser clave durante este invierno. Eso sí, no hay que ser alarmistas porque, como apuntaba el catedrático Alberto Abanades, un gran apagón no entra dentro de los escenarios posibles.