3 años para una empleada de hogar que robó 88.805 euros de una casa en León

El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de tres años y seis meses de prisión para una empleada de hogar que robó joyas, monedas de oro y dinero de la casa en la que trabajaba por un valor de 88.805 euros, y vendió junto a su hijo los objetos robados en dos locales de compraventa de oro en León.

La Sala de lo Penal ha dictado una sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, que ratifica la prisión para la trabajadora por un delito de robo en casa habitada y su hijo (año y medio) por un delito de receptación, pero rebaja la indemnización a la víctima porque se recuperaron 22 monedas de oro por un valor de 32.235 euros, que no incluía la sentencia de la Audiencia de León.

De esta forma, el Supremo rebaja la cantidad a devolver que pasa de 64.430 a 32.195 euros. Lo que no modifica es el pago a las entidades de compraventa de oro, de 26.765 euros.

Los hechos ocurrieron entre octubre y noviembre de 2015. La condenada, que trabajaba como empleada de hogar, cogió sin autorización ni consentimiento alguno la llave y un sobre cerrado con una combinación de un armario para abrir la caja fuerte donde la dueña de la casa guardaba joyas, monedas de oro y dinero.

Hasta 37 objetos, entre relojes, sortijas, broches, pendientes, pulseras, collares y monedas de oro, valorados en 55.405 euros a los que hay que sumar 33.400 euros en efectivo.

Posteriormente, su hijo vendió parte de las joyas y monedas de oro sustraídas por su madre en dos establecimientos de compraventa de oro y recibió 31.455 euros que se repartieron él y su madre.

Más tarde, la Policía Judicial recuperó parte de las joyas y monedas valoradas en 46.175 euros que se entregaron a su propietaria, si bien faltaban objetos valorados en 9.230 euros

En cuanto al dinero en efectivo, se recuperaron 6.750 euros que la condenada ocultaba debajo del colchón de su cama y 3.685 euros que llevaba en su bolso cuando fue detenida, por lo que el dinero no recuperado asciende a 22.965 euros.