Biden deja en espera a Pedro Sánchez tres meses después de su toma de posesión
El presidente estadounidense todavía no ha establecido contacto directo con Pedro Sánchez a pesar de que ya se ha telefoneado con los principales líderes internacionales
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A menos de una semana de que se cumplan tres meses de la toma de posesión de Joe Biden como presidente de los Estados Unidos en el Palacio de la Moncloa todavía no han recibido una llamada de Washington para realizar la primera toma de contacto entre el Gobierno de Pedro Sánchez y la Administración de Joe Biden. Un hecho curioso, ya que en los últimos meses hemos podido ser testigos de diferentes llamadas entre Biden y algunos de los principales líderes de la Unión Europa como Macron o Merkel y también, en varias ocasiones, contactos con Londres para conversar con Boris Johnson.
Este gesto puede pasar desapercibido en el día a día de la crónica política de nuestro país, pero estamos ante un gesto diplomático que puede dejar clara cuál va a ser la relación entre España y Estados Unidos para los próximos cuatro años.
Sobre la mesa hay varios asuntos, que competen a Madrid y a Washington, que deberían ser tratados con relativa rapidez. Uno de ellos los aranceles impuestos a ciertos productos españoles, como el aceite de oliva o el vino, tan importantes para las exportaciones de uno de los sectores más importantes de nuestra economía: la agricultura y el sector primario.
También, desde que Biden estaba en modo campaña, el nuevo presidente demócrata insistió mucho en mejorar las relaciones con las principales potencias europeas, España está considerada la cuarta. Por lo tanto, parece que después de que Biden tomará sus primeros contactos con el Despacho Oval esa opinión ha cambiado, sobre todo en relación con nuestro país.
En los casi tres meses que Biden lleva a los mandos de la primera potencia mundial se han producido dos rondas de contacto. Una de ellas de primer nivel con países como Francia, Alemania, Reino Unido, Israel, Japón y también con importantes administraciones supranacionales como la Unión Europea, la ONU y también la OTAN. Además, Biden también ha mantenido primeros contactos con el Papa Francisco.
Después, se produjo una ronda con países situados en un segundo nivel en cuanto a preferencias diplomáticas, España tampoco estaba entre ellos: Chile, Sudáfrica, Nueva Zelanda Jordania, Kenia, Argentina o Costa Rica. En este sentido, el único contacto entre España y Estados Unidos se produjo a mediados del pasado mes de febrero, cuando el secretario de Estado, Anthony Blinken, mantuvo una conversación telefónica con su homóloga española, Arancha González Laya. Este contacto se produjo después de que Blinken conversase antes con otros 50 representantes diplomáticos de otros países.
Este contexto marca una situación excepcional en cuanto a las relaciones entre Moncloa y la Casa Blanca. Cuando Donald Trump llegó a la Presidencia de Estados Unidos solo pasaron tres semanas hasta que se produjo el primer contacto entre el líder republicano y Mariano Rajoy. Por su parte, Barack Obama solo tardó 72 horas en llamar a José Luis Rodríguez Zapatero tras su toma de posesión en el año 2008. Juan Fierro, corresponsal de COPE en Estados Unidos, anota que este contexto diplomático forma parte de la normalidad, ya que "Estados Unidos tiene otras preferencias diplomáticas en la actualidad".
Expertos y corresponsales de varios medios de comunicación consultados por COPE coinciden en que nos encontramos ante una situación esperada y que puede ser un enfriamiento preocupante en las relaciones entre ambos países, en un momento clave para la globalización en el que se necesita cooperación y respuestas coordinadas frente a la pandemia y la crisis social derivada de ella.
David Alandete: "Moncloa ha pedido una conversación bilateral con Biden"
El corresponsal de ABC en Estados Unidos, David Alandete, ha explicado en COPE.es que en la actualidad hay un enfriamiento notable entre Madrid y Estados Unidos: "Si las relaciones entre Estados Unidos y España fueron francamente malas durante el mandato de Donald Trump, no es que hayan mejorado con la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca. Es cierto que el nivel de reproches y tensión es menos patente, pero la relación en este momento es fría. Hay varios hechos que dejan patente esta situación, como es la inexistencia de una conversación bilateral entre Sánchez y Biden, aunque hay constancia de que Moncloa la ha pedido".
También, el periodista ha querido remarcar que el último informe sobre la libertad de prensa redactado por la Diplomacia de Estados Unidos no ayuda a mejorar esos contactos: "Otro punto a tener en cuenta es que la diplomacia estadounidense ha denunciado en los últimos días que España no ha respetado la libertad de prensa, un estudio que comenzó la Administración Trump, pero que ha terminado ahora la Administración Biden".
Por último, coincidiendo con otras fuentes consultadas, Alandete remarca que si Biden quiere algo de España llamará directamente a Bruselas: "Las relaciones entre Estados Unidos y España han quedado también bastante tocadas por la negativa del Gobierno a mediar en la crisis venezolana y por su postura respecto al embargo cubano. Es algo respecto a lo que Trump tenía una postura muy significada y Biden no ha mostrado un importante cambio. Por tanto no hay confianza en que España tenga un cambio de posición a corto o medio plazo que justifique un acercamiento más patente. De momento Joe Biden cuando tenga que negociar algo con España lo va a hacer a través de la Unión Europea".
Enrique Cocero: "El silencio de Washington no es positivo para España"
Por su parte, el consultor político y experto en política estadounidense, Enrique Cocero subraya que este contexto se produce porque para la Administración Biden España puede estar en un escalón diplomático por debajo de otras potencias como Francia o Alemania: "Sea cual sea el motivo, de lo que habla el silencio no es positivo para la representatividad de España, porque las relaciones internacionales no son algo de "guardar para el final lo que más me gusta". Biden, nada más confirmar victoria, llamó a los mandatarios vecinos Trudeau (el primero) y López Obrador. Después vendrían los europeos: Macron, Merkel, Johnson, Merkel y Micheál Martin de Irlanda. Después vendrían mandatarios de la zona del Pacífico, el Papa y, acto seguido, el Presidente Conte de Italia, los dos principales dirigentes de Israel, Von Der Leyen, Michel, Stoltenberg (OTAN)… bueno, la lista es tan exhaustiva como, posiblemente, extenuante". Si España no está en esa relación es, posiblemente, porque se considera un país menor o porque la situación aquí es tan compleja que es mejor no tocarla.
"Sea cual sea, no es una buena señal. Es una cuestión de cómo un país es de crítico para su propio interés y cómo es considerado en cuanto aliado cercano. A riesgo de parecer descreído, diría que con la llamada a Von Der Leyen y a Michel, Biden ha cumplido con todos los países de Europa con los que no tiene una relación cultural directa y presente en función de las comunidades que habitan Estados Unidos, algo que sí ocurre con Italia o Irlanda", explica Cocero.
También, el consultor político no ha confirmado que haya una especie de estrategia anglosajona entre Biden y Johnson porque se hayan telefoneado en más de una ocasión: "Nunca estuvimos ante una "antigua coalición". Me refiero a que los lazos entre ambos países siempre han sido muy fuertes, incluso con el Reino Unido dentro de la UE. Hablamos, además, de dos países con potencia para desarrollar las vacunas y no son muchos en el mundo. Los dos países han sido aliados en dos guerras mundiales, el SACEUR (Comandante Supremo Aliado en Europa) siempre ha sido un militar americano y su adjunto un general británico, con lo que las pruebas de que esa cercanía siempre ha estado ahí es notoria".
En cuanto a la política de aranceles, Enrique Cocero coincide con la opinión de muchos expertos, que defendían que Biden no tocaría algunas políticas económicas impuestas en la era Trump: "Los aranceles dieron comienzo porque Trump impuso criterio cuando la UE "dopó" a Airbus y, con ese movimiento, hizo menos competitivo a Boeing. Hablamos de un mercado mundial como es el aeronáutico en el que EE. UU. tiene un papel importante y cuya evolución afecta de forma sensible a la economía del país. Biden no lo ha tocado (como no ha tocado otras políticas de Trump) porque son cuestiones altamente estratégicas y en absoluto cosméticas. Mientras no se cierre el tema del trato de la UE a sus empresas, no creo que los aranceles vayan a moverse más allá de pequeños gestos".
A todo ello debemos unir el silencio diplomático que existe en Madrid respecto al futuro de la Embajada de Estados Unidos. Todavía no se conoce quien sustituirá en el cargo a Duke Buchan, aunque en declaraciones al diario 'El País', el pasado mes de febrero, el encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos en España, Conrad Tribble, señaló que las relaciones entre España y Estados Unidos son buenas y que no existe ningún peligro que pueda poder en riesgo la estabilidad de España: "No tengo ninguna preocupación para la estabilidad de España".