Las matemáticas traicionan a Adriana Lastra al contar: "Es de letras"

La portavoz del PSOE, Adriana Lastra, ha sido la socialista que más duro ha cargado contra la oposicón hasta el punto de contar, de aquella manera, los insultos

Las matemáticas traicionan a Adriana Lastra al contar: "Es de letras"

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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La jornada de este miércoles en el Congreso planteaba pocas incógnitas. Sin saber si el PP de Casado se decantaría por la abstención o la negativa a la prórroga del estado de alarma de Sánchez, el acuerdo trazado desde Moncloa con Ciudadanos y PNV dejaba todo bien amarrado para los socialistas. Finalmente, Casado ha anunciado desde la tribuna que los suyos se abstendrían, tras un discurso que apuntaba más hacia un voto contrario. A Sánchez poco le ha importado, al asegurar que para él tanto da una abstención como un voto en contra. Como colofón, ha sido Adriana Lastra la encargada de seguir con la oposición a la oposición y al tratar de contar los "insultos" que Casado habría proferido contra su formación, le han fallado las cuentas.

Adriana Lastra y los "insultos por minuto" de Casado

La portavoz parlamentaria del grupo socialista, Adriana Lastra, ha acusado este miércoles al líder del PP, Pablo Casado, de batir este miércoles en el Congreso "su propio récord: 37 insultos en quince minutos en su primera intervención, a razón de tres insultos por minuto". Rápidamente, las redes se han puesto a echar cuentas y han querido corregir a la portavoz socialista.

Comprobemos los datos. 37 insultos en 15 minutos. La operación matemática pertinente es la de la división. Esta consiste en coger el número total de insultos y repartirlos entre el número de minutos. Así obtendremos el número real des insulto que, según Adriana Lastra, Casado habría proferido contra su formación. El resultado es 2,47 (redondeando decimales). No son 3 insultos como ha afirmado Lastra, pero tampoco se queda lejos, a fin de cuentas, estamos a 0,53 insultos por minutos más.

Pero demos una vuelta al análisis numérico de Lastra. Si asegura que Casado ha proferido 3 insultos por minuto y ha hablado durante 15 minutos, en realidad estaríamos hablando de 45 insultos. Aquí, Lastra no habría medido bien el número de insultos de Casado. Vemos pues que o Casado ha insultado de menos (a razón de medio insulto menos por minuto; o ha insultado de más, con 8 insultos que la portavoz no habría contabilizado.

La crítica de Adriana Lastra al PP

En su segunda intervención en el debate para la prórroga del estado de alarma, Lastra ha lamentado que esa haya sido "la aportación" del PP al "esfuerzo" de la sociedad española por salvar vidas.

Y para corroborar sus palabras, la portavoz ha referido desde la tribuna del Congreso algunos de los insultos que el líder del PP ha proferido hoy contra el grupo socialista y, en concreto, contra Pedro Sánchez: "Manipulador, mentiroso, cesarista, malversador, incompetente, incapaz, inepto, chapucero, pésimo, negligente, arbitrario, irresponsable, opaco o fraudulento, así hasta 37 insultos".

Lastra también ha subrayado el "desastre" del PP en la gestión de la crisis en Madrid y ha asegurado que los populares convirtieron a esta comunidad en el "laboratorio de privatizaciones de residencias y de la sanidad". Y ha advertido a los populares de que llegará el momento de "pedir cuentas".

Pero Lastra también tiene para ERC

Lastra también se ha dirigido al portavoz de ERC, Gabriel Rufián, a quien ha dicho que su discurso recoge "dos incoherencias y una certeza". En este sentido, ha explicado que una de las incoherencias es que piden mantener las medidas del estado de alarma pero sin estado de alarma; y la segunda, insistir en que el Gobierno no quiere sentarse a negociar.

En cuanto a la certeza, Lastra ha dicho que Rufián es consciente de que la decisión de votar no a la prórroga es una "decisión política" que se tomó "hace tiempo", y ha recordado que el 27 de abril la portavoz nacional de ERC, Marta Vilalta, "lo hizo público".

Por tanto, Lastra ha pedido a Rufián que "no se ampare en otras cosas" porque el Gobierno sí quiere negociar y hablar. Y ha "tendido la mano" a ERC porque el futuro de este país, ha dicho, pasa porque "la izquierda de este hemiciclo se entienda".