El periodista Miguel Ángel Robles presenta 'Philosophers', un ensayo en defensa del "pensamiento filosófico"

Europa Press

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El periodista y doctor en comunicación Miguel Ángel Robles ha presentado este jueves en Sevilla, en la librería Verbo, su ensayo 'Philosophers', editado por Almuzara, en el que recoge en forma de entrevistas sobre temas de actualidad algunas de las aportaciones "más brillantes e imperecederas" de 41 pensadores separados por 25 siglos de historia.

En su intervención, a preguntas del escritor Daniel Ruiz, Robles ha opinado que la filosofía "debe cuestionar las ideas dominantes y desafiar lo irremediable". "El papel del pensamiento filosófico debe ser el de impedir la resignación ante la realidad y el futuro que se presenta como inevitable, señalando las injusticias y liderando el combate social contra ellas", ha aseverado en una nota de prensa.

En este sentido, "frente a la superchería del pensamiento positivo", Robles ha reivindicado la filosofía como "un ejercicio esencialmente negativo que contradice la racionalidad de lo real y propone otra racionalidad posible aunque nunca se haya consumado". "Pensar filosóficamente es pensar en pequeñas utopías. La soberanía popular, los derechos sociales, el sufragio universal, la abolición de la esclavitud, la paz dentro de los estados fueron utopías impensables en su momento hasta que se convirtieron en logros históricos y hoy son derechos irrenunciables".

"Sin un pensamiento negativo y sin la aspiración filosófica de influir sobre la realidad no hubieran sido posibles", ha dicho Robles, para quien la filosofía tiene hoy otros "campos de batalla y otras utopías importantes" por las que luchar, entre las cuales ha destacado la protección de la democracia y las libertades y derechos de los individuos frente a las compañías que concentran la inteligencia tecnológica.

"No corresponde a los tecnólogos e ingenieros de datos decidir cómo queremos vivir, esa es o debería ser una decisión política a la que todos estamos compelidos y en la que necesitamos especialmente la voz de los intelectuales", ha afirmado el autor de 'Philosophers', que ha expresado su convicción de que la filosofía debe salir del ámbito de la academia y reclamar el espacio que le corresponde en el debate público.

"La filosofía tiene que aspirar a cambiar la realidad y para eso tiene que influir, tiene que estar cerca del debate político y social. Ceder esa influencia a los tecnólogos, a los charlatanes y a las celebridades digitales es pegarse un tiro en el pie", ha señalado Robles, quien ha explicado que el título de su libro responde a esa intención: la de presentar a los "philosophers" como los "influencers" a los que sí habría que prestar atención en el espacio público.

En esta misma dirección, el autor ha advertido de que la filosofía debe ayudar a combatir los prejuicios heredados del pasado, pero también las "supersticiones sobre el futuro", que "son más peligrosas porque nunca han sido ensayadas". Asimismo, ha indicado que el pensamiento crítico es más necesario que nunca, "pero al modo en que lo concebía Nietzsche, es decir, atacando siempre ideas, nunca personas, y cuestionando sobre todo las ideas más aceptadas e indiscutibles, es decir, las opiniones y valores del mainstream". "Creo que eso es algo que nos deberíamos tatuar en la piel, o mejor en el cerebro, pues se distancia radicalmente de la forma en que habitualmente se ejerce la crítica en las redes sociales", ha dicho Robles.

Citando a Karl Popper, el autor de 'Philosophers' ha señalado que la filosofía debe ayudar también a devolver la racionalidad al centro de la vida pública, en detrimento de las emociones. "El filósofo austriaco llevaba razón cuando dijo que incluso los sentimientos más nobles como el amor no son válidos para el espacio público, pues el amor es preferencial, supone una inclinación hacia las personas queridas, y la democracia se basa en el valor fundamental y contrario de la igualdad política", ha comentado Robles, que ha señalado la paradójica transferencia que se está produciendo en el modo de tomar decisiones de carácter público y privado: "Mientras que las primeras obedecen cada vez más a criterios emocionales, las segundas son cada vez más racionales y objetivas, incluso en la elección de pareja".

El periodista y doctor en Comunicación se ha mostrado también muy crítico con la deriva de la comunicación política, institucional y corporativa, que ya analizó en su libro 'El lado oscuro', por su "abandono de la verdad y los hechos y su instalación en el terreno del relato y los propósitos grandilocuentes". "He sentido gran satisfacción al ver que pensadores como Arendt advirtieron ya del peligro de prescindir de los hechos y llevar las motivaciones al primer plano, porque la transparencia de los propósitos conduce inevitablemente a la hipocresía", ha argumentado Robles, que ha aludido también a Shopenahuer para sentenciar que somos lo que hacemos y en las intenciones sin consumación hay poca o ninguna verdad.

"Detrás de esa máxima periodística de que los hechos son sagrados y las opiniones libres hay una verdad filosófica mucho más profunda, y los dircom la estamos traicionando con tanta visión, misión y valores y tanto relato cogido con alfileres con la realidad", ha sentenciado. Sobre el libro, el autor ha afirmado que recoge las ideas de grandes autores sobre cuestiones de política, ética, comunicación y educación que nos interesan a todos.

"Las respuestas son afirmaciones literales o casi literales recogidas en sus obras. Al presentarlas en forma de conversación, lo que he hecho es poner en relación estas ideas con temas actuales, demostrando que son totalmente vigentes e intentando que así brillen más", ha explicado Robles, que ha añadido que la idea del libro se le ocurrió leyendo a Séneca, quien escribió precisamente que "leer a los clásicos es una forma de conversación con los que ya no están".

"Creo que hay una cierta percepción de la filosofía como una disciplina especulativa y abstracta, despreocupada de las cuestiones cotidianas que nos interesan. Y la intención de este libro es demostrar lo contrario: que en los grandes filósofos, incluso en los más alejados en el tiempo, podemos encontrar respuestas de indiscutible actualidad a las cuestiones que están hoy en los medios y en las redes sociales y de las que hablamos en nuestras conversaciones privadas", ha indicado Robles.