Termina sin acuerdo la reunión del bloque progresista del TC para consensuar un candidato a la presidencia
Ninguno de los dos candidatos ha dado un paso al lado, lo que amenaza con provocar una fractura en este grupo
Madrid - Publicado el
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El bloque progresista del Tribunal Constitucional no ha logrado consensuar una candidatura de unidad para presidir el órgano, de manera que el gallego Cándido Conde Pumpido y la almeriense María Luisa Balaguer se disputarán este miércoles en el Pleno la presidencia, con todos los escenarios abiertos.
Fuentes jurídicas han informado de que la reunión de este martes del sector progresista ha terminado sin acuerdo, dado que ninguno de los dos candidatos ha dado un paso al lado, lo que amenaza con provocar una fractura en este grupo.
Previamente, las fuentes habían señalado la necesidad de acudir al pleno con una candidatura de unidad y que, preferentemente, fuera María Luisa Balaguer la que retirara su candidatura, dado que Conde Pumpido es el candidato nato del bloque progresista y goza con el apoyo de cuatro de los cinco magistrados de este grupo, exceptuando a los dos contendientes.
Pero falta por saber a quién apoyará la nueva magistrada María Luisa Segoviano, que sigue guardando silencio y cuyo voto es crucial, habida cuenta de que se da por hecho que los cuatro conservadores no votarán por Conde Pumpido por su cercanía con el PSOE tras ocho años como fiscal general durante la etapa de Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno, algo que este sector tiene muy presente
Sus votos irían así a Balaguer, una magistrada con una ideología reconocida progresista y vinculada con el feminismo, pero alejada del foco de los partidos y a quien, desde filas conservadoras, ven más "empática" porque aseguran que "siempre busca sumar"
De esta forma, habría un empate técnico en el Pleno -cinco a cinco-, que Segoviano resolvería con su voto, siempre y cuando no se aborde un último intento por esa ansiada candidatura de unidad.
Es más, las fuentes deja claro que van a intentar hasta el final llegar con un solo candidato al Pleno, aunque vistas las posturas de uno y otro candidato lo ven ya sumamente complicado.
Si no hay cambios, el Pleno votará entre los dos candidatos, para lo cual será preciso una mayoría absoluta en primera vuelta o una mayoría simple en segunda vuelta. En caso de empate técnico, porque exista un magistrado que opte por la abstención -un escenario que tampoco se descarta- el presidente sería automáticamente el magistrado más antiguo, este es el conservador Ricardo Enríquez.
Precisamente, Enríquez se postula para la vicepresidencia siguiendo una tendencia en el tribunal de que el grupo minoritario -ahora el conservador- ocupa la vicepresidencia del órgano constitucional.