Estos son los nombres que más suenan para suceder a Liz Truss al frente del Gobierno británico

La primera ministra de Reino Unido, Liz Truss, ha anunciado su dimisión, que ya ha notificado al rey Carlos III, aunque permanecerá al frente del Gobierno hasta que se elija a un sustituto. "Es la mejor decisión para mantener a Reino Unido en una condición económica estable", ha dicho en una declaración ante Downing Street.

Al menos 17 diputados han pedido que dimita por el caos político de estas semanas, marcado por el desmantelamiento prácticamente total del programa fiscal que anunció el Ejecutivo en septiembre, según el recuento de Sky News.

Todo después de que ayer la ya ex ministra del Interior de Reino Unido, Suella Braverman, presentase ayer miércoles su dimisión, tras saltarse los protocolos de seguridad, en un contexto especialmente delicado por el Gobierno por la fallida política económica, que ya derivó la semana pasada en la salida del titular de Finanzas.

Por lo pronto, Truss ha anunciado que será un proceso rápido y que el próximo viernes 28 de octubre se elegirá a su sucesor o sucesora en el cargo al frente del Gobierno británico, el quinto en los últimos 6 años. De hecho, en 'La Tarde' ha estado Moisés Ruiz, experto en Comunicación y liderazgo político y profesor en la Universidad Europea de Madrid, para analizar los motivos de la dimisión de Truss. Ha dicho, sobre la crisis política del Reino Unido que "Los británicos no reconocen por orgullo que el Brexit fue un error".

El Comité 1922, el grupo encargado de solventar la sucesión de líder en el Partido Conservador, espera que "para el viernes, 28 de octubre", se conozca ya el nombre de la persona que sustituirá a Liz Truss en la jefatura de Gobierno, dentro de un proceso que se anticipa breve.

El presidente del comité, Graham Brady, ha confirmado la fecha tras hablar con el principal responsable de la gestión del Partido Conservador, Jake Berry. Será así un cambio ágil, lejos por tanto de los dos meses que necesitaron los 'tories' para culminar la sucesión de Boris Johnson.

"Deberíamos tener un nuevo líder al mando antes de la declaración fiscal que tendrá lugar el 31 de octubre", ha explicado Brady ante los medios, poco después de que Truss compareciese para confirmar que no podía culminar el mandato que recibió hace mes y medio de sus propios compañeros.

Berry, quien ha sugerido que "si hay solo un candidato, hay solo un candidato", poniendo así sobre la mesa la posibilidad de un posible nombre en consenso, ha explicado más tarde que cualquiera que quiera postularse como aspirante deberá contar con el apoyo de al menos un centenar de diputados conservadores de los 357 que hay actualmente.

Además, ha apuntado que el lunes a las 14.00 horas (una hora más en la España peninsular) se cerrará el periodo para presentar las candidaturas. Si en ese momento hubiera más de una candidatura, se iniciaría un proceso que culminaría el viernes pero, en caso de que tan solo hubiese un aspirante, este sería nombrado nuevo primer ministro el mismo lunes.

"Hemos actuado rápidamente y continuaremos (haciéndolo para) garantizar que este país tenga la estabilidad que requiere", ha dicho Berry, quien ha incidido en que "si solo hay candidato, no habrá voto de confirmación de los miembros del partido".

De acuerdo con la aritmética del Partido Conservador, tan solo podrá haber un máximo de tres candidatos que cuenten con los al menos cien apoyos necesarios, despejando por tanto la posibilidad de un proceso largo como ocurrió tras la dimisión de Johnson.

Estos son algunos de los nombres más sonados para suceder a Liz Truss:

Entre los nombres más destacados aparece el de Suella Braverman, la cuál dimitió de manera forzosa como Ministra de Interior menos de 24 horas antes de la renuncia de Truss propiciando, posiblemente, el golpe definitivo a su legislatura. Braverman, de 42 años, criticó el gobierno de Truss en su carta de dimisión por incumplir las promesas de endurecer las leyes de inmigración. Es la favorita de los que defienden las medidas neoliberales de Truss. Aún no se ha pronunciado sobre su candidatura a través de sus redes sociales.

Por otro lado, está el secretario de Defensa Ben Wallace, de 52 años. Cuenta con un gran respaldo en su partido gracias a su respuesta a la invasión rusa hacia Ucrania. Se trata de un nombre habitual en estas encuestas. No ha confirmado ni desmentido aún si se presentará.

Jeremy Hunt, el ministro de Finanzas y ex Secretario de Cultura y Deportes, Salud y Relaciones Exteriores, es otro de los nombres que más están sonando en las últimas horas. Además, fue el que perdió las primarias contra Boris Johnson en 2019. También se presentó en las últimas, pero no llegó a ser de los dos candidatos finales. Tampoco ha dicho nada en sus redes sociales.

Uno de los nombres que suenan también, y seguramente se trate del más sorprendente, es el de Boris Johnson. El ex primer ministro británico podría tener los apoyos necesarios para defender su candidatura. También se trata del hipotético candidato que más polémica suscita, ya que el Comité de Ética del Parlamento le tiene que juzgar el próximo mes de noviembre por mentir a la Cámara sobre sus fiestas. Ahora mismo se encuentra fuera del Reino Unido pero ya hay parlamentarios que han hablado sobre su posible regreso.

Por otro lado, una de las principales favoritas es la Presidenta de la Cámara de los Comunes, Penny Mordaunt. También fue Ministra de Defensa durante la presidencia de Theresa May. Quedó tercera en las primarias que ganó Truss. De hecho, la apoyó públicamente cuando quedaban ella y el próximo favorito para vivir en el número 10 de Downing Street. Tampoco se ha pronunciado durante las redes sociales, pero desde Londres se da por hecho que va a intentar tener ese apoyo mínimo de 100 parlamentarios conservadores.

Como no podía ser de otro modo, el nombre de Rishi Sunak tenía que aparecer. El hombre que perdió contra Liz Truss en las últimas primarias del Partido Conservador. Ex ministro de Finanzas, dimitió en verano a raíz de los escándalos de Boris Johnson y en desacuerdo a sus políticas. Se trata de uno de los pocos que puede conseguir cierta unidad dentro de su partido, ya que fue el candidato que más apoyo de diputados recogió en la primera vuelta de las últimas primarias. 137 diputados, una cifra que le pondría muy posiblemente en cabeza de la carrera por ser Primer Ministro. Tampoco ha hablado en sus redes sociales sobre su candidatura, pero ahora mismo es el principal favorito en las casas de apuestas británicas.