Indignación, bochorno y tristeza

La Comisión de Reconstrucción Social y Económica constituida en el Congreso celebró ayer una sesión tan indignante y bochornosa como triste

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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La Comisión de Reconstrucción Social y Económica constituida en el Congreso celebró ayer una sesión tan indignante y bochornosa como triste. Esta comisión nació para adoptar medidas consensuadas que sirvieran a la restauración de un orden social que ha sufrido el envite del Coronavirus. Por eso es indignante que quienes tienen en sus manos esta responsabilidad se enzarcen en peleas de baja estofa. Es indignante que un Vicepresidente del Gobierno sea incapaz de honrar con sus palabras y actitudes la institución que representa. Es bochornoso que el tono con el que los diputados se dirigen unos a otros sea el propio de una pelea callejera. Y es triste que ante un drama como el vivido en España haya quienes prefieran atizar el fuego de la discordia.

El objetivo del Gobierno de España debe ser reactivar la economía, adoptar medidas que sirvan de protección social a los más afectados, ser previsor ante posibles rebrotes epidémicos y favorecer la cohesión y la paz social. En política no vale todo. Las consecuencias de actitudes excluyentes y sectarias como las que el Vicepresidente adopta cada día con más desparpajo, afectan a la vida concreta de los ciudadanos. La política debe hacerse en las instituciones y con el debido respeto a las reglas de juego. Incendiar la calle y buscar la confrontación fuera de las instituciones es peligroso. La cuestión es que Iglesias lo sabe, y tal vez por eso lo practica, mientras Sánchez no le para los pies.