¿Qué fue del “blandiblú”? La masa viscosa y verde que hacía las delicias de los más pequeños

¿Qué fue del “blandiblú”? La masa viscosa, verde y maleable que hacía las delicias de los más pequeños y era el terror de los padres

¿Qué fue del “blandiblú”? La masa viscosa y verde que hacía las delicias de los más pequeños

Fernando J. Romero

Publicado el - Actualizado

2 min lectura

Sólo con pronunciar su nombra hacía que los padres pusiesen una cara de auténtico asco. Nos estamos refiriendo al “Blandi Blug”, coloquialmente llamado “blandiblú” o "slime". Un juguete que en la década de los 80 del pasado siglo tuvo una enorme popularidad entre los pequeños de la casa.

El ‘blandiblú’ comenzó a comercialiszar en la década de los 70 del pasado siglo por parte de la juguetera Mattel. En sus inicios, formaba parte, como accesorio, de otros juguetes como, por ejemplo, He-Man y los Masters del Universo, es también propiedad de Mattel, y como famoso agente que hacía mutár en la colección de las Tortugas Ninja.

En concreto, se trataba de una masa viscosa de color verde, que tenía la propiedad de pegarse a casi cualquier cosa o superficie, y no se rompía al ser tremendamente moldeable. El hecho de que no se le pudiese dar forma, por su carácter viscoso, no impedía que hiciese las delicias de los niños, que jugaban con ella estirándola y lanzándola a uno y otro lado. De hecho, ese era uno de los motivos por el que muchos padres se negaban a comprar este juguete a sus hijos, pues acaban lanzándola contra las paredes de casa, generando unas manchas muy complicadas de eliminar.

¿Qué fue del “blandiblú”? La masa viscosa y verde que hacía las delicias de los más pequeños

No parece un juguete demasiado divertido, pero fue todo un éxito de ventas. La razón puede ser su parecido con ‘los mocos’, algo que entre los más pequeños ya sabéis que, no se sabe muy bien por qué, parece divertirles.

Nació por casualidad en la década de los 40 del pasado siglo

Para crear esta masa, se mezcla ácido bórico y aceite de silicio. Nació por casualidad de la mano del científico de la General Electric James Wrightm, quien, en 1943, intentaba descubrir una goma artificial que pudiera ayudar a confeccionar las botas de los soldados que luchaban en la Segunda Guerra mundial.

No era lo que buscaba, pero James notó que producía un ruido adictivo y generaba una sensación agradable al tocarla, aunque no pasó de ahí y el científico estadounidense siguió con la búsqueda de un sustituto del caucho y se olvidó de esta mezcla pegajosa.

Casi una década más tarde, Peter Hodgson, un experto en marketing, decidió utilizar aquel experimento fallido como un juguete, comenzando así su comercialización.

¿Qué fue del “blandiblú”? La masa viscosa y verde que hacía las delicias de los más pequeños

Tal ha sido la popularidad que ha tenido este juguete que, aún hoy, se sigue comercializando bajo diferentes nombres y marcas, pero siempre con el mismo tacto pegajoso y viscoso que tanto parece agradar a los más pequeños de la casa.

Fácil de fabricar de manera casera

La fabricación de este producto es tan sencilla que existen incluso tutoriales en la red social de YouTube, que nos enseñan a elaborarlo de manera casera. Eso sí, este método puede llegar a ser peligroso para los niños, debido a algunos de los productos que hay que usar y que son tóxicos y pueden producir reacciones en la piel. Por ello, algunas empresas han cambiado la formula originaria del blandibú para eliminar los componentes toxicos.