España tira por tierra en 10 días el trabajo de un mes y medio: así hemos vuelto al riesgo alto

Desde hace más de una semana, todos los indicadores epidemiológicos son cada vez más altos y ya deja entrever una situación de nuevo ascenso que podría poner en jaque la temporada estival. Los contagios se han multiplicado en todas las comunidades, la incidencia comienza a encontrarse en una nueva fase de crecimiento y la preocupación de las autoridades se centra ahora en poner freno a tiempo a este ascenso. Es más, ya hay dirigentes políticos que se han atrevido a calificar este crecimiento como una "quinta ola". Ha sido la consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, quien ha trasladado su preocupación por los contagios en la comunidad, que en los últimos cinco días se han multiplicado por doce.

A pesar de que el número de fallecidos sigue descendiendo cada día (ayer se notificaron ocho, la cifra más baja desde hace un año) ahora en la preocupación está en el incremento de los contagios y de la incidencia acumulada. No obstante, tampoco podemos olvidar el repunte que ha habido de ayer a hoy en la presión hospitalaria.

El macrobrote masivo de Mallorca, que ha afectado a prácticamente todas las comunidades, la reapertura del ocio nocturno, el fin de las mascarillas en exteriores y el fin del toque de queda a principios del mes de mayo, como un conjunto de factores, podrían ser la 'explosión' perfecta que hayan desencadenado en una nueva curva ascendente, que las autoridades esperan poder detener con ayuda de la vacunación.

La incidencia, en niveles de mayo

Repasando los informes diarios publicados por el Ministerio de Sanidad, la incidencia acumulada ha crecido en la última semana y media los mismos puntos que nos costó más de un mes descender.

La última vez que España tuvo una incidencia similar a la de hoy, de 152,82 casos por 100.000 habitantes, es similar a los del pasado 17 de mayo, cuando era de 151,82. Desde entonces nos ha costado un total de 46 días (en torno a un mes y medio) conseguir bajar estos niveles de incidencia, que alcanzó su mínimo el pasado 22 de junio, cuando fue de 95,25 casos por 100.000 habitantes. Por su parte, y si hablamos del incremento que ha habido desde el punto más bajo de las últimas semanas, el 22 de junio, han pasado tan solo diez días. Es decir, en diez días España ha subido su incidencia lo mismo que nos costó 46 días bajar.

No podemos olvidar, en cualquier caso, la preocupación que hay sobre los más jóvenes de entre 12 y 19 años, y de 20 y 29. En el primer grupo de edad la incidencia es de 406,13 casos tras aumentar 60,87 puntos desde ayer. En cuanto a los jóvenes de entre 20 y 29 ha crecido hasta 83,08 puntos también en solo 24 horas, que se sitúa así en una incidencia total de 449,82 casos por 100.000 habitantes. Esto significa que el incremento de contagios es el resultado directo de los contagios entre los más jóvenes en España, lo cual ha hecho que la incidencia media nacional se haya disparado más de 60 puntos en tan solo diez días.

Aumento de incidencia, contagios... y presión hospitalaria

Desde hace meses, la presión en los hospitales parecía haber comenzado a remitir y las UCI de todas las comunidades pudieron abandonar la fase de riesgo extremo (por encima de 25 por ciento de ocupación). Desde entonces, la situación había experimentado un claro descenso hasta hoy. Si bien es cierto que no se trata de un repunte, a priori, preocupante, no podemos apartar la mirada de nuestros centros sanitarios, que este viernes cuentan con dos ingresos más en UCI, que rompe así con esa tendencia descendente que se había visto desde hace meses. La ocupación es de 6,39 por ciento, un 0,01 por ciento más. Como decimos, se trata de la primera vez en varios meses que el porcentaje de ocupación en UCI sube.

En cuanto al número de ingresos también se puede apreciar en el informe del Ministerio de Sanidad que ha habido 55 nuevos pacientes desde ayer en los hospitales, cuya ocupación total es del 1,99 por ciento, un 0,05 más que ayer. Aparentemente, todavía es pronto para apresurarse y hablar también de un aumento de la presión hospitalaria pero será necesario estar muy pendientes de la evolución de nuestros hospitales para ser capaces de aventurar si nos encontramos ante un incremento puntual o, como ha asegurado la consejera de Sanidad de Castilla y León, una "quinta ola".