¿Por qué los japoneses devuelven siempre los objetos perdidos? Se debe al ‘Hito no me’
Más de 7 mil artículos extraviados se reportan cada día en Tokio. La moralidad que se les inculca desde niños hace que sientan la obligación de entregarlo de vuelta a su dueño
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Lo más probable es que si vas a Japón y olvidas algún artículo personal, consigas recuperarlo. En este país asiático existe un Centro de Almacenamiento de Objetos Perdidos en Lidabashi (Tokio), donde se guardan cientos de objetos que pierden diariamente los millones de habitantes de Tokio. Durante la pandemia, el número de objetos perdidos se vio reducido de manera importante, pero, aun así, más de dos millones de artículos llegaron al almacén
Sin embargo, las pertenencias pasan primero por las comisarías de policía que se encuentran repartidos por las calles de la ciudad y se denominan koban. Sus oficiales se dedican patrullar el área en el que se encuentren, reciben objetos perdidos que mandan al almacén y cuidan de las personas que estén perdidas o borrachas. En Tokio, se consideran de tal importancia que hay 824 oficinas locales.
En el año 2019 se superó el número récord de 4,15 millones de objetos perdidos. El Centro de Almacenamiento asegura que cada día se reportan más de siete mil artículos perdidos por sus dueños en Tokio, siendo el lugar donde más cosas se reciben con respecto al resto de Japón (20% del total). Pero no solo las cifras son llamativas, sino que, al menos un 90% de los teléfonos móviles (pieza con la tasa más alta de olvido) son recuperadas por sus propietarios. Las carteras son el segundo objeto más perdido y casi el 70% de las veces son devueltas.
También es común que lleguen al almacén de objetos perdidos, licencias de conducir, tarjetas del seguro médico y tarjetas de crédito. Casi todos ellos son devueltos en el mismo día que se pierden, sin embargo, hay otras cosas que no son reclamadas por los dueños, como es el caso de los paraguas. Menos de un 1% son solicitados de vuelta, ya que son complementos baratos y fáciles de sustituir. Los artículos permanecen tres meses en el almacén a la espera de que los reclamen. Si nadie lo hace, la persona que lo encontró podrá quedarse con ello y, si esta no lo desea tampoco, pasan a ser parte de la propiedad de la ciudad y se venden en subastas públicas.
“Hito no me”
Las personas encargadas de reportar y almacenar los objetos perdidos comentan que es muy frecuente que les entreguen grandes cantidades de dinero que se han extraviado, por ejemplo, 1 millón de yenes (8.800 dólares). También comentan que han encontrado ciertos objetos extraños como un diente postizo o unas muletas. ¿Cómo es posible que la gente entregue lo que ha encontrado? Japón lleva más de mil años teniendo leyes sobre los objetos perdidos, recalcando la importancia de ser buenos ciudadanos.
Es todo una cuestión de educación moral. Ya desde que son niños, se les educa en devolver los objetos que no son suyos. Por esto es muy común, que la primera vez en la vida de una persona japonesa que interactúa con un oficial de policía sea de niño entregando en la koban alguna cosa que se ha perdido. Así se refuerza una relación de cercanía con el ciudadano y el policía.
Los japoneses llevan un estilo de vida basado en el “Hito no me”, traducido como el “ojo de la sociedad”. La existencia de ese “ojo” que les vigila, los lleva por el buen camino (incluso sin policía de por medio), ya que dan una gran importancia a lo que piensen los demás de su comportamiento y sus modales. Por lo tanto, según cómo sea su forma de actuar frente a los objetos perdidos, así será la imagen que tenga la sociedad. Tiene más peso de poder la mirada que otros puedan echarles que la propia autoridad.