Qué fue de... el juego de la bola de velcro
El juego de la bola de velcro es todo un clásico del verano. ¿Has jugado alguna vez? Lo recordamos
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El verano, aunque algo más atípico de lo que acostumbra por el coronavirus, está en su máximo esplendor: las altas temperaturas, las vacaciones, las terrazas y, por supuesto, la playa y la piscina. Entre las muchas diversiones del período estival, hay una que nos acompaña desde siempre cuando aprieta el calor: el juego de la bola de velcro.
¿Qué es el juego de la bola de velcro?
También conocido como pega-bola o scratch ball, el gran protagonista de este pasatiempo es una pala circular dotada de una capa de velcro. A ella puede adherirse una bola del tamaño de las pelotas de tenis, que está incluida en el juego de palas. ¿Cuál es la gracia? Evitar que la pelota caiga al suelo. Y lograr que, por tanto, siempre se pegue a las palas con velcro.
¿Cómo se practica el juego de la bola de velcro?
Para jugar, tenemos que colocarnos la pala en la mano izquierda si somos diestros y viceversa en el caso de ser zurdos. Tiene que ser así para que nuestra mano de mayor habilidad quede libre para lanzar la pelota hasta donde queramos.
La clave para conseguir más puntos que el adversario es el lanzamiento de la pelota. Eso sí, no es tan fácil que la bola no se pegue en las palas con velcro: hasta los lanzamientos más difíciles pueden ser repelidos por estas palas que parecen platos.
El juego de la bola de velcro presenta la gran ventaja de que podemos desarrollarlo en cualquier lugar veraniego que se precie: la playa, la piscina, el jardín, el parque… Incluso podemos practicarlo en el agua, ya que las bolas mojadas también se pegan con facilidad a las palas.
Edades y número de participantes del juego de la bola de velcro
Se trata de un juego estupendo para fomentar la coordinación ojo-mano. La edad recomendada para empezar a practicarlo es a partir de los 3 años. Por tanto, es ideal para toda la familia. De hecho, no es nada extraño encontrarse a padres e hijos practicándolo en la arena de nuestras playas, ya que es muy parecido al juego de las palas normales y corrientes de toda la vida.
Lo más habitual es que el juego de la bola de velcro se practique por parejas. Sin embargo, también se puede practicar, en el caso de que los participantes sean unos cuantos, en equipos de seis. La puntuación necesaria para lograr la victoria va al gusto de quien juegue: 7, 10, 21…
Además, es el típico juego muy fácil de encontrar en cualquier tienda especializada e incluso en los populares ‘todo a cien’. La única pega que quizá haya es que a los niños más pequeños puede costarles separar la bola del velcro de las palas. En el caso de que esto ocurra, los padres tendrán que intervenir.
Queda claro que el juego de la bola de velcro, un clásico veraniego, es infalible si queremos pasar un buen rato entre baño y baño… e incluso en medio de uno. Sin duda, es un pasatiempo con solera, ya que ha pasado de generación en generación hasta llegar a nuestros días. Y para quedarse, como se puede comprobar cuando el buen tiempo acompaña.