Sucesos
El misterio de la desaparición de las piedras de Tarifa
Constituyen un suelo noble tan valorado desde las construcciones romanas andaluzas, y en especial desde el siglo XVI, como inusual y objetivo hoy en día de los amigos de lo ajeno
El misterio de la desaparición de las piedras de Tarifa
Jerez - Publicado el - Actualizado
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Un elemento constructivo valioso por ser cada vez más raro encontrar se ha convertido en la provincia de Cádiz, de un tiempo a esta parte, en goloso atractivo de los amigos de lo ajeno. Entre lo más llamativo está que esto ocurra en el suelo que pisan los ciudadanos en plena vía pública. Lo que menos sorprende, que ello se cebe con un casco histórico con visos de dejadez por mucho que se impulsan acciones que intenten el revulsivo.
La popularmente conocida como losa de Tarifa es un tipo de pavimento proveniente de la pizarra natural no exfoliable extraída en las cercanías de esta población a orillas del Estrecho. Se produce por consolidación de la arcilla en el entorno del Campo de Gibraltar, donde la roca se encuentra en presión por dos placas tectónicas convergentes, la euroasiática y la africana. Ello hace muy apreciada esta Piedra Jabaluna, como también se le conoce.
Este pavimento es considerado un elemento tradicional de la arquitectura andaluza. Alcanzó un gran éxito a partir del siglo XVI y se ha venido usando en viviendas y zonas de uso común, o en palacios, como la Casa de Pilatos en Sevilla, en el Patio de los Naranjos en la catedral hispalense, en el Castillo de Vejer o en el faro de Conil. Pero podemos ir más allá en el tiempo y encontrarla en la decumana de Baelo Claudia, tan cerca del lugar de producción.
En Cádiz la encontramos en el entorno de la Catedral y hasta en el propio cuerpo de campanas de sus torres, en el Castillo de Santa Catalina o en la calzada que aún se aprecia al pie de los soportales que flanquean el Arco de los Blancos. Y, en Jerez, da continuidad a ese gusto por su uso en lugares nobles como palacios y templos. Por ello no es casualidad que el entorno de la iglesia de San Lucas fuera de los primeros en evidenciar su robo.
Esta semana han sido recuperadas una veintena de estas losas por parte de la Policía Local jerezana sustraídas en las calles del centro histórico de la localidad. La colaboración ciudadana ha contribuido a ello denunciando casos flagrantes en los que se ha descubierto piezas de este valioso pavimento en lugares manifiestamente inusuales. De hecho, hace un par de meses era sorprendido uno de los ladrones metiendo en su casa del centro.
Pero en las calles siguen observándose los huecos que dejaron estas pesadas losas. Hace años que estos robos son habituales teniendo en guardia a los miembros de la Asociación de Vecinos del Centro Histórico de Jerez que han venido denunciando estos robos. Ha llegado a pensarse que esta sustracción podría acaecer por encargo al no tratarse de un hecho aislado. En cualquier caso, la reposición de estas piedras en las calles corre a cargo del Ayuntamiento.
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