La Iglesia se suma al Boombastic: esta es su aportación en el festival musical
La parroquia de Lugo de Llanera abre sus puertas 24 horas para "todo lo que necesiten los jóvenes"
Oviedo - Publicado el - Actualizado
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En un festival musical de verano hay todo tipo de servicios alrededor de la música. En el Boombastic de Asturias existe, además, una gran aportación para los chavales y no son los organizadores quienes la ofrecen. Por segundo año consecutivo, el párroco de Lugo de Llanera, José Antonio Bande, ha abierto las puertas de la iglesia para "lo que haga falta". En esta ocasión, la parroquia está a disposición de los jóvenes las 24 horas del día.
La iglesia está situada muy cerca del recinto de La Morgal donde se junta cada día unas 55.000 personas para disfrutar en directo de las actuaciones musicales programadas. Unas veces por proximidad y otras por necesidad, el caso es que hay "un goteo constante" de jóvenes que se acercan hasta la parroquia durante los tres días que dura el Boombastic.
¿Qué ofrece a los jóvenes?
La iglesia de Lugo de Llanera tiene espacio para cargar móviles, una ducha o aseos para quien los pueda necesitar. Pero, además, ofrece apoyo espiritual, momentos de recogimiento, oración y conversar con el párroco o pedirle ayuda en situaciones complicadas. José Antonio Bande se ha encontrado con chavales que llegan al festival con amigos o pareja y que han sufrido "tensiones" durante su estancia en Llanera. "Vienen a contarme sus problemas para dialogar y desahogarse". Hay, además, chavales que quieren disfrutar de la música sin perder el contacto con Dios o los que simplemente "vienen a refrescarse".
Bande ha visto como muchos jóvenes "te abren su corazón" en medio del Boombastic porque, además de la música, quieren hablar. Ese diálogo es "muy enriquecedor", afirma el párroco dispuesto a atender "todas las necesidades que se puedan presentar".
"Son muy educados"
Si Bande ha optado por abrir las puertas de la iglesia las 24 horas del día es porque ha visto que puede ser útil para los jóvenes. "Son educados, ejemplares, muy buenos chicos", destaca el párroco de Lugo de Llanera.