SOCIEDAD

Los vecinos del Edificio Chasna se quejan de que el Ayuntamiento de Arona les ha hecho caso omiso

El consistorio mantiene que se les ha dado a estos vecinos todas las ayudas que permitía la ley

Bryan Estupiñán

Tenerife - Publicado el - Actualizado

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Como recordarás, el pasado 12 de marzo se produjo el desalojo de un edificio a medio construir en Costa del Silencio, en el municipio de Arona, debido al mal estado de la infraestructura, en la que vivían unas 90 familias con bajos recursos económicos, que no tenían un lugar alternativo en el que vivir.

Dos meses después, desde la redacción de Herrera en COPE Tenerife, nos hemos interesado en cómo se encuentran sus vecinos en la actualidad, y qué ha sido de sus vidas desde el desalojo.

Iris es una joven de 27 años con una realidad bien distinta a aquel entonces. Actualmente, reside en la casa de su madre, con el inconveniente de que el piso cuenta con unas dimensiones pequeñas y conviven en él un total de seis adultos, dos niños y un perro. A pesar de verse forzada a abandonar el sur de Tenerife, sigue teniendo contacto con sus anteriores vecinos, a los que visita en algunas ocasiones, y recuerda constantemente cómo su vida, siendo tan joven, pudo dar un giro tan radical.

Una de sus lamentaciones fue la falta de ayuda por parte del Ayuntamiento de Arona, ya que afirma que se sintió totalmente desamparada, “Desde que salimos de ahí nadie se ha preocupado por nosotros para saber si estamos bien, si necesitamos ayuda psicológica, o comida”.

Juan no ha tenido tanta suerte con lo que respecta a la vivienda. Un señor le cedió amablemente un local comercial en el que se pudo quedar un tiempo, pero ante la necesidad de alquilarlo para sacar dinero, tuvo que volver a pernoctar en una caseta de campaña ubicada en el mismo terreno del edificio en Chasna. Critica que el ayuntamiento les ha hecho caso omiso y que junto a él se encuentran unas 50 personas en su misma situación.

La concejala de Servicios Sociales, Ruth Martín, se mostró totalmente decepcionada por las declaraciones de Iris y Juan, clarificando que ambos recibieron ayudas de hasta 3000 euros procedentes del plan de intervención cuando no estaban en una situación tan vulnerable como otras personas que por no estar empadronados en el municipio de Arona, quedaron fuera de estas ayudas.