La pandemia ha empeorado la visión de los canarios

La pandemia del coronavirus ha empeorado la salud ocular de las españoles, hasta el punto de que pueden haberse producido pérdidas de visión irreparables en el caso de aquellos pacientes con patologías previas o no detectadas. Es la conclusión obtenida del Informe “#VisióndeFuturo: la salud ocular en tiempos de coronavirus”, elaborado por un grupo de trabajo de cinco clínicas de referencia españolas y portuguesas —entre ellas, la tinerfeña Clínica Nivaria— a partir de una encuesta a más de medio centenar de médicos especialistas en oftalmología.

El estricto confinamiento de los meses de marzo y abril de 2020 derivó en que la ciudadanía en general pasó mucho más tiempo delante de una pantalla, además de permanecer en espacios interiores y reducir las visitas al oculista, algo que los especialistas recomiendan hacer periódicamente.

El director médico de Clínica Nivaria, Javier Rodríguez, ha subrayado que durante la pandemia se ha intensificado el uso de la visión cercana e intermedia. “Aunque el ser humano está programado para ver de lejos, nos hemos convertido en una especie que mira todo de cerca, incrementándose así problemas como la presbicia o la miopía”, señala el especialista.

La mayoría de los expertos consultados han detectado que la miopía es el trastorno más afectado por la pandemia en los menores de edad. Ya estaba considerada una epidemia infantil antes del coronavirus pero ahora, insisten, la tendencia a un mayor uso de pantallas y a permanecer más tiempo en casa puede provocar que su frecuencia sufra un aumento aún mayor en los próximos años.

Javier Rodríguez explica que, “cuando realizamos un esfuerzo visual continuado dedicado a la visión cercana, estimulamos el crecimiento del globo ocular y, por tanto, de la miopía. Por eso, recomendamos hacer descansos visuales y que los niños jueguen en el exterior, para que estimulen la visión lejana en vez de la cercana”.

En el caso de los adultos, el ojo seco es el trastorno identificado como más prevalente a causa de los hábitos vinculados a la pandemia. El uso frecuente de mascarillas incrementa la irritación ocular, y dedicar mucho tiempo frente a pantallas o trabajar muy intensivamente con el ordenador aumenta la sequedad, al disminuir la frecuencia de parpadeo.

“Para descansar la vista y ayudar a una correcta hidratación del ojo, recomendamos seguir la regla del 20-20-20: cada 20 minutos de trabajo con el ordenador, mirar durante 20 segundos a lo lejos, a una distancia de 20 pies (6 metros). El descanso visual es fundamental para remitir los síntomas del ojo seco”, explica el doctor Rodríguez.

Además, los expertos recomiendan trabajar en un ambiente iluminado y humidificado y correctamente, dado que la sequedad ambiental causada por la calefacción o por el aire acondicionado puede empeorar el trastorno.