La Linterna con Ángel Expósito, hoy desde el Monasterio de Santo Toribio de Liébana en Cantabria
Expósito analizará también el problema de la sequía y la gestión del agua en España
La Linterna con Ángel Expósito, hoy desde el Monasterio de Santo Toribio de Liébana en Cantabria
Santander - Publicado el - Actualizado
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Ángel Expósito realiza esta tarde La Linterna desde el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, en Cantabria, con motivo del final del Año Santo Jubilar Lebaniego que termina el próximo 14 de abril.
Durante el programa se hará balance de lo que ha sido este Año Santo y se abordarán los retos de un camino que está llamado a ser uno de los grandes atractivos turísticos de la región. En el Monasterio con Expósito estará, entre otros invitados, la presidenta del Gobierno de Cantabria, María José Saénz de Buruaga, una de las tres presidentas autonómicas del PP que gobierna en solitario tras las elecciones del pasado mes de mayo.
Un programa en el que el director de La Linterna descubrirá también algunos de los secretos del Monasterio que alberga el trozo más grande de la Cruz de Cristo, el ‘Lignum Crucis’.
La Linterna con Ángel Expósito, hoy desde el Monasterio de Santo Toribio de Liébana en Cantabria
Los tesoros de Santo Toribio
El Monasterio de Santo Toribio de Liébana, en los inicios del templo (segunda mitad del siglo VI), se denominaba San Martín de Turieno y la nueva advocación de Santo Toribio se fija en el año 1.125. En el año 1.181 se constituye la Cofradía de Santo Toribio, hoy denominada de la Santísima Cruz.
La Linterna con Ángel Expósito, hoy desde el Monasterio de Santo Toribio de Liébana en Cantabria
En el siglo XIII se transforma en priorato y pasa a depender del monasterio de Oña (Burgos). Para entonces nuestro cenobio había conseguido un extenso dominio territorial, que abarcaba heredades no sólo en Liébana, sino también de las provincias limítrofes.
Su vida monástica, sin embargo, se extingue en el año de 1.837 con la Desamortización de Mendizábal, momento en el que marchan por esta causa los padres Benedictinos que custodiaban el templo hasta entonces.
Pero en el año 1961, tras la restauración del ruinoso edificio por un Patronato constituido al efecto en la Diócesis de Santander, se hace cargo de él una comunidad de cinco padres Franciscanos, que lo siguen regentando, hasta el día de hoy.
La comunidad franciscana fue escogida por su tradición en custodiar lugares santos, como Jerusalén y porque una tradición señala que San Francisco de Asís, el fundador de la orden en 1.209 visitó el Monasterio de Santo Toribio de Liébana en su peregrinar a Compostela.
En la actualidad hay cinco lugares en el mundo donde se celebra un Año Santo jubilar; estos son: Jerusalén, Roma, Santiago de Compostela, Santo Toribio de Liébana y Caravaca de la Cruz (Murcia), lugar, éste último, que obtuvo este privilegio hace unos pocos años.