REPORTAJE COPE
La 'Cristóbal Colón' de José Romero de Ávila pone rumbo al Museo Naval de Madrid
Después de siete años de duro trabajo, esta maravilla del modelismo naval se expondrá en Madrid, para después pasar por Ferrol, San Fernando y Cartagena
Albacete - Publicado el - Actualizado
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El modelista naval José Romero de Ávila acaba de concluir la construcción de la fragata F 105 'Cristóbal Colón', un buque de la Armada Española que durante siete años ha modelado en su taller, con miles de horas de trabajo, la última tecnología aplicada y un exquisito diseño de cada uno de los detalles de este barco, desde los radares, las antenas o el hangar para helicópteros que porta, hasta las pequeñas figuras humanas que se reparten por las cubiertas y que parece que, de un momento a otro, van a cobrar vida.
COPE Albacette ha estado con José en su taller, en ese lugar en el que, con estricta disciplina y restando horas a otras obligaciones, ha ido completando esta magna obra que mide algo más de dos metros de longitud (escala 1/72) y que dentro de unas semanas se convertirá en patrimonio de todas aquellas personas que decidan -a partir del 16 de septiembre- ir a verlo y admirarlo en el Museo Naval de Madrid.
En la capital de España estará hasta el mes de enero, pero la Cristóbal Colón ya tiene otras citas en Ferrol, Cartagena o San Fernando para después, así que, José Romero de Ávila, espera que haya un hueco en febrero para que sea expuesta en Albacete, acompañando a esta maqueta de alqunas otros elementos que pueda aportar la Armada Española.
A las gentes de la Armada, precisamente, a su excepcional labor, ha querido dedicar Romero de Ávila este gran trabajo. El modelista ha ido mostrando mes a mes y casi día a día, su trabajo en redes sociales y no han sido pocas las aportaciones que ha recibido de los propios mandos del Ejército español, con los que ha mantenido un contacto permanente.
"Me basta con que el Señor me vea"
Nos ha parecido interesante preguntarle en este reportaje a Romero de Ávila por esas muchas horas de soledad en el taller, por ese tiempo dedicado a detalles que al común de los mortales nos parecen casi insignificantes y que apenas pueden verse ya que se encuentran muy en el interior de su maqueta. Él nos ha contestado con claridad: "Soy creyente y me basta con que el Señor lo vea. Yo sé que ese esfuerzo merece la pena y confío en que sirva para ensalzar ese trabajo de la Armada Española, que tanto hace por nosotros".