Los farmacéuticos, contra las mascarillas a 0,96€: ¿Quién asesora al Gobierno con precios fuera de mercado?
Asegura además,que esto da vida a un mercado negro de mascarillas que ya existe: "El estraperlo de las mascarillas"
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunciaba este martes un precio máximo de venta al público de las mascarillas quirúrgicas a 0,96 euros por unidad, un hecho que ha provocado las quejas de muchos farmacéuticos, preguntándose quién ha fijado ese precio “muy fuera de mercado”. Para muchos de estos profesionales significa una venta a pérdidas, después de buscar precios asequibles durante semanas. Para muestra un Botón.
Elisa Miguel es farmacéutica en Magaz de Pisuerga, una localidad a 10 km de Palencia. Ante la demanda creciente de sus vecinos, compró hace unos días 800 unidades, buscando los precios más bajos posibles en origen procedentes de proveedores fiables. Como ella misma subió a redes sociales pagó algo mas de 1.200 euros por el lote, resultando cada mascarilla quirúrgica a un precio de 1,5 €.
En su farmacia estaba vendiendo estas mascarillas a precio de coste, sin margen de beneficio con el objetivo de ayudar a sus vecinos. Ahora si quiere dar salida deberá venderlas a perdidas. Unos 400 euros.
Estallaba el Lunes en sus redes sociales y ayer pasaba por los micrófonos de COPE Palencia.
“No solo estaba cobrando a precio de coste, sino que tenía que invertir mi tiempo en empaquetar cada una individualmente y explicar a mis clientes como debían ponerla y quitarla con seguridad y lo hacía encantada”, asegura.
“Yo no se quien tiene cabeza en este gobierno, ¿Quién le asesora para poner un precio totalmente fuera de mercado?. Es cierto que los precios estaban inflados al principio en origen, porque había mucha demanda pero se estaba estabilizando. Es un disparate.
Mañana cuando vengan a preguntar, voy a contestar que no tengo. Prefiero regalarlas a mis amigos y familia que venderlas a pérdidas porque alguien, que no tiene ni idea de a como estaban las mascarillas y a qué precios nos las suministran me obligue”.
Asegura además, que esto da vida a un mercado negro de mascarillas que ya existe.
“Lo ha habido desde el principio, es el estraperlo de las mascarillas. A mi me las han ofrecido por facebook o whastapp, particulares que se habían hecho con un lote después de pasar aranceles y aduanas. Ante la escasez y la demanda de la población, se vendían a precio totalmente desorbitado y sin IVA. Todo un mercado negro por debajo”.
“A mi me encantaría poderlas vender a 96 céntimos y a 20. Ojalá! pero la realidad es que tanto proveedores como nosotros no encontramos mascarillas más baratas en el mercado. Esto ha estallado a nivel mundial. Todo el mundo las está buscando y si en España pagamos a 0,96 vamos a volver atrás porque en otros sitios y países van a pagar más.
Si lo que querían era precios realmente bajos, deberían de haber pasado el IVA de este producto a súper-reducido, como ocurre con los medicamentos. Al bajar el IVA hubiesen bajado el precio sin romper de nuevo el mercado de mascarillas”.
No es el único producto con problemas. Hay otro tipo más de EPI demandado, qué son las mascarillas FFP2, con el que ha pasado absolutamente lo mismo "Los pedidos que tenía hechos de esas mascarillas me los han echado para atrás, porque nadie quiere vender algo que en unos días van a regularizar y nadie sabe como. Ocurre incluso con los guantes. El mercado está paralizado en este momento”.
Otro asunto que ha provocado el malestar de algunos farmacéuticos es la imposibilidad de ofrecer a la población test rápidos.
Elisa Miguel, asegura qué ella ya los tiene en su farmacia de Magaz de Pisuerga. "Los pedí y llegaron. Al segundo día nos dijeron que no podíamos venderlos. Yo los tengo y serán para mi familia y los empleados de mi farmacia. Son sencillos de utilizar e igual que se mide la glucemia, con una gota de sangre y un reactivo dan el resultado.
A las farmacias nos han ofrecido los distribuidores estos test, pero como no los podíamos servir se han dejado de comprar. Entiendo que haya compañeros que se nieguen a hacerlos, en nuestro caso estábamos encantados porque su aplicación es una medida lógica para frenar esto, pero nos lo han echado para atrás”