Colegios afectados por la Zona de Bajas Emisiones presentan alegaciones al Ayuntamiento de Valladolid

Asociaciones de madres y padres reclaman "soluciones" en los horarios de entrada y salida para los centros educativos ubicados en el centro de la ciudad

Javier Luna

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La implantación de la Zona de Bajas Emisiones en Valladolid, prevista para el 1 de enero de 2024, condicionará la vida de las familias con hijos en edad escolar. Al menos, la de aquellas que necesiten del vehículo privado para sus desplazamientos y cuyo centro educativo se encuentre dentro del perímetro establecido por el Gobierno municipal, que se ha duplicado con respecto al inicialmente previsto.

A punto de cumplirse el período de alegaciones, un total de 11 centros educativos se han dirigido al Ayuntamiento de Valladolid. En un escrito dirigido al alcalde, Óscar Puente (PSOE), la Federación Católica de Asociaciones de Madres y Padres pide “una solución” al “problema” que puede acarrear la entrada en vigor de la Zona de Bajas Emisiones.

La presidenta de la Federación en Valladolid, Ángela Melero, asegura que las familias, especialmente aquellas “con niños pequeños”, están “preocupadas”. “Los políticos imponen medidas, pero no soluciones a esas decisiones impositivas que trastocan el presupuesto y los hábitos de las familias”, lamenta.

En el escrito remitido al Ayuntamiento plantean algunas alternativas, como “abrir en tramos” la Zona de Bajas Emisiones, coincidiendo con los horarios de entrada y salida de los colegios. Permitiendo, así, el paso de vehículos “durante, aproximadamente, una hora” con independencia de su etiqueta medioambiental.

También proponen poner “lanzaderas” a disposición de los centros educativos. “Independientemente de la titularidad de los mismos”, matizan. En este sentido, sugieren el establecimiento de “lugares señalados”, como aparcamientos disuasorios, para el “embarque” de los alumnos en estos autobuses urbanos.

El PP pide su paralización

El equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Valladolid asegura que seguirá dialogando y recogiendo las propuestas de los distintos sectores afectados por la implantación de la Zona de Bajas Emisiones.

En todo caso, la concejal de Medio Ambiente, María Sánchez (VTLP), advierte: “La normativa es obligatoria”.

Este jueves, 16 de febrero, concluye el período de alegaciones a la Zona de Bajas Emisiones, contra la que también se ha pronunciado el Partido, que pide paralizar su tramitación.

Los 'populares' avanzan, además, que revisarán el perímetro de algo más de tres kilómetros de la Zona de Bajas Emisiones en caso de hacerse con el bastón de mano el próximo 28 de mayo. Sánchez enmarca sus críticas en el período preelectoral y acusa al PP de querer “disputarse con Vox el título de adalides de la defensa del derecho al humo”. “El PP solo pone pegas”, denuncia la edil de Medio Ambiente.