La lucha contra la planta biometano de Lugo continúa: los vecinos recogen 4.500 firmas en contra
El miércoles termina el plazo para presentar alegaciones a esas instalaciones y los residentes en Coeses anuncian "movilizaciones" si el proyecto no es "paralizado" por la Xunta
Lugo - Publicado el - Actualizado
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Los vecinos de Coeses y de otras parroquias de Lugo afectadas por el proyecto para la implantación de una planta de biometano en esa zona del municipio han logrado reunir en unas pocas semanas algo más de 4.500 firmas en contra de esa instalación que, a su juicio, provocaría un gran impacto ambiental.
Este miércoles, 10 de julio, termina el plazo de exposición pública, pero los vecinos afectados aseguran que ya han presentado “muchas alegaciones” en contra de ese proyecto que, a su juicio, deberían ser suficientes para conseguir su paralización.
Además, esta tarde volverán a recoger firmas en contra de la planta de biometano en el centro de la ciudad y, a partir de mañana, comenzará el recuento final de las mismas para presentarlas ante la Xunta de Galicia.
CONTAMINACIÓN Y OLORES MUY MOLESTOS
Manuel Abuín, que vive en Coeses, explica que la propia empresa, en el proyecto, reconoce que “emitirá vertidos al río Miño y gases contaminantes”, además de producir “olores muy molestos”.
Para los vecinos, la posibilidad de que la planta se instale en la ubicación prevista los tiene “en un sin vivir”.
Recuerda que en esa zona del municipio de Lugo “casi nada vive ya de la ganadería”. En realidad, precisó, “se ha convertido en una zona residencial, donde vive mucha gente que tiene su trabajo en otro lugar y a elegido el campo para estar más tranquilo que en la ciudad”.
A su juicio, ese modo de vida es totalmente incompatible con la presencia de una planta de esas características. “Los vertidos acabarán por contaminar nuestros pozos, con los que nos abastecemos de agua, porque no tenemos traída municipal. Cada uno usa el suyo”.
También hay fuentes públicas y los vecinos temen que el agua resulte contaminada por la actividad de esa planta.
Por otra parte, preocupan mucho “los depósitos de ácido sulfúrico puro” que la empresa utilizará para tratar los residuos que después convertirá en biometano. “Si hay cualquier tipo de accidente, todo el pueblo podría quedar arrasado”, lamenta Manuel.
APOYO SOCIAL
Los vecinos ya cuentan con el apoyo de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Lugo y de otros colectivos que se han sumado a su causa. En los próximos días se reunirán también con la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería e Turismo de Lugo, porque “la contaminación y los malos olores llegarán también a la ciudad” y la “sociedad tiene que movilizarse”.
De hecho, Manuel anuncia que, una vez pasado el plazo para presentar alegaciones, esperarán una respuesta por “parte de la Xunta de Galicia y de la empresa”. Si no “paralizan el proyecto”, habrá “movilizaciones”, asegura.
El propio pleno del Ayuntamiento de Lugo ya se pronunció por unanimidad en contra de la ubicación de esa planta de biometano