Hosteleros de Verín salen a la calle para protestar por el cierre de bares y restaurantes

Más de un centenar de hosteleros de Verín recorrieron esta mañana el casco urbano de la villa para protestar por el cierre obligatorio de bares y cafeterías, hasta el próximo 4 de diciembre. El cese de la actividad, se produce después de que el sector cerrase voluntariamente bares y cafeterías, desde el 13 de octubre hasta el pasado día 31, para intentar bajar la curva de contagios en el municipio de Verín. A la concentración y posterior marcha se sumaron buena parte del comercio local, que cerró los negocios con el cartel “Fun tomar un café”.

La concentración comenzó pasadas las 11,30 horas en la Plaza do Concello, a la que también se sumaron vecinos de la villa. Al grito unánime de “queremos traballar”, y con pancartas alusivas a la protesta, iniciaron el recorrido por la avenida de Portugal, Luis Espada, calle Diputación y Hermanos Moreno, para finalizar de nuevo delante de la casa consistorial.

No fue una manifestación “al uso”, ya que no estaba autorizado ningún corte de carretera. Los hosteleros se limitaron a caminar por las aceras del centro urbano, donde incluso se escucharon tímidos aplausos desde los balcones. Todos con mascarilla, guardando la distancia mínima de seguridad y portando pancartas con eslóganes como “Salvemos la hostelería” o “No somos el problema, somos parte de la solución”.

La concentración estuvo organizada por hosteleros de Verín, a través de un grupo de WhatsApp, al margen de la asociación de hosteleros de la comarca. Empresarios participantes en la marcha coincidieron en señalar que “el problema del virus no está en bares y restaurantes, sino en otros lugares más concurridos y en fiestas y reuniones privadas”. Algunos fueron más allá, refiriéndose a que no existen informes científicos, que avale que el coronavirus se pueda transmitir más en los bares y restaurantes donde se respetan las medidas sanitarias de distancia, mascarilla y desinfectante».